El PP continúa a vueltas con las desviaciones presupuestarias. Pese a que esta misma semana el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, enterró sus dudas sobre la solvencia económica de Andalucía, el presidente del PP andaluz y candidato a presidente de la Junta, Javier Arenas, volvió a reclamar ayer al presidente andaluz, José Antonio Griñán, que dé a conocer la cifra de déficit con la que concluyó 2011.

Para Arenas, que intervino en un foro junto al presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, supone un "ataque al debate democrático" comenzar una campaña electoral (oficialmente, a partir del 9 de marzo) sin que se conozcan las cuentas de la comunidad.

Arenas recordó que hace justo un mes Griñán cifró en un 1,4% ese déficit, y en menos de 24 horas su consejera de Hacienda (Carmen Martínez Aguayo) lo elevó en torno a la media de las demás comunidades, un 3%.

Esta confusión dio pie a que desde la propia sala de prensa del Consejo de Ministros, la vicepresidenta primera del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, cuestionase la solvencia de Andalucía, asunto sobre el que Arenas sigue rotando.

El candidato popular lamentó que "el Gobierno andaluz no haya dado aún con las cuentas" y contrapuso, "mientras Griñán dice que no se adeuda nada", una retahíla de impagos que le llegan a su despacho que le hacen mantener lo contrario. Expuso que desde el Gobierno andaluz se están confirmando pagos a 900 días, que a las empresas sanitarias se les debe 1.000 millones, a los laboratorios farmacéuticos 1.300 millones, a las empresas de la construcción otros mil millones y otras deudas contraídas con los centros especiales de empleo, los libreros y las agencias de fomento de alquiler.

A unas horas de que el Gobierno presentase su plan, Arenas prometió un calendario de pagos "cierto y fiable" para los proveedores de la Junta.

Si Arenas se quejó de no conocer las cuentas andaluzas para la campaña, el PSOE hace lo propio con la presentación de los Presupuestos del Estado aplazados hasta que se celebren las elecciones autonómicas (30 de marzo, según fechó Rajoy el jueves), le recordó una periodista. El presidente del PP andaluz derivó la queja al Gobierno de Rodríguez Zapatero, que se despidió sin hacerlo y añadió que "todo el mundo conoce que hacen falta al menos seis meses y este Gobierno lo hará en tres". "Creo que se harán en tiempo récord; decir que no se hacen porque hay elecciones andaluzas es ridículo, éste es el Gobierno más reformador de la historia de la democracia", afirmó.

En su intervención en este foro dedicado a la austeridad y la transparencia de las administraciones públicas, el presidente del PP-A criticó que "la ley más importante que sale cada año del Parlamento andaluz", la de Presupuestos, se distorsione porque esa previsión no tiene nada que ver con lo que la Junta ejecuta.

Como es tradición en el PP, Arenas anotó un año más las inversiones que se han dejado de presupuestar. Anotó que en 2011 se dejaron en el tintero 436 millones en educación, 499 millones en sanidad, 157 millones en bienestar social y 642 millones en políticas de empleo, lo que suma "un recorte" de 1.700 millones. "Ésta es la forma de recortar de los actuales gobernantes de la Junta", señaló.

Arenas sumó que desde 2008 se han dejado de gastar 7.800 millones, mientras que se gastaron 3.800 millones más de lo previsto en gasto corriente, lo que a su juicio "es lo peor que se puede hacer para salir de la crisis". Arenas anunció que si el PP gobierna llevará a cabo un plan de recorte del gasto corriente "muy exigente", en el que quedarán excluidas las áreas de educación, sanidad y asuntos sociales. "Son las reformas las que evitan los recortes", aseguró.

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