La consejera de Cultura de la Junta de Andalucía, Rosa Aguilar, se saltó ayer el guión previsto. Los miembros del Pleno del Patronato de la Alhambra -entre los que se encuentran, además de la Junta, el Ayuntamiento de Granada, el Ministerio de Cultura y la Universidad de Granada- no esperaban que hubiera sorpresas en un encuentro del que, en teoría, debía salir el nuevo director que sustituirá a Mar Villafranca, que renunció hace una semana por el escándalo de las audioguías. A Cultura le bastaba presentar su propuesta y oír a los miembros del Patronato para luego llevar el nombramiento al Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía, pero Rosa Aguilar prefirió esperar.

De hecho, ni siquiera llegó a presentar oficialmente su propuesta. La consejera llegó ayer a Granada con un nombre en cartera, pero tras las "conversaciones informales" que ha mantenido con el resto de las administraciones -antes del pleno se reunió con el alcalde de Granada, José Torres Hurtado, la rectora de la Universidad de Granada, Pilar Aranda, y el representante del Ministerio de Cultura- ha preferido "dejar sobre la mesa el nombramiento" y agotar la vía de diálogo hasta el final para alcanzar un acuerdo sobre una figura "de consenso".

Aunque Aguilar rehusó decir cuál era la apuesta de Cultura, el nombre que ha sonado con más fuerza durante los últimos días -al margen de responsables culturales con un perfil más técnico como Muriel Páez, Enrique Gámez, Pedro Benzal o Enrique Moratalla- ha sido el del parlamentario socialista Manuel Pezzi. Y no había gustado nada, ni en los círculos culturales ni en los políticos. De hecho, el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Granada, Juan García Montero, daba por hecho antes del pleno su nombramiento, adelantado por El Independiente de Granada, y no dudó en criticar su "perfil de "crispación constante y oposición frontal". De hecho, García Montero aseguró que el Ayuntamiento presentaría en el pleno de hoy datos sobre "vinculaciones personales y materiales" de Pezzi que lo harían poco idóneo para el cargo (en referencia al hecho de que su hija trabajara hasta el pasado mes defebrero en Heritage, la empresa familiar de José María Visedo que aparece en la querella de la Fiscalía).

Pero, finalmente, la consejera de Cultura no llegó ni siquiera a pronunciar su nombre en el pleno. "Sé escuchar y he entendido que había que esperar para intentar culminar un acuerdo, que sería una buena manera de impulsar una nueva etapa. Tengo la voluntad de que haya unanimidad, de que todo lo que hagamos, lo hagamos juntos y podamos darle un impulso aún mayor a la Alhambra", explicó Aguilar, que apuntó que si "parar tres o cuatro días más significa concitar consenso y que impulsemos todos juntos esta nueva etapa", ese tiempo extra será un tiempo "bien dedicado".

En principio, la idea de la titular de la Consejería de Cultura es convocar un nuevo pleno -este sí extraordinario- no más allá del lunes o el martes de la próxima semana, y hacerlo con una propuesta definitiva que cuente con el beneplácito de todas las administraciones. Eso sí, Aguilar reconoció que siempre existe la posibilidad de que las conversaciones no lleguen a buen término.

La renuncia de Mar Villafranca como directora del Patronato de la Alhambra por el caso de las audioguías no ha sido la única. Los cuatros altos cargos del organismo señalados por la Fiscalía en su querella están apartados de sus cargos. La consejera de Cultura, Rosa Aguilar, explicó ayer que tras la renuncia de Villafranca, también se produjo la de la secretaria general del Patronato, Victoria Chamorro, que pidió la "remoción de su puesto". En este caso, al tratarse de una funcionaria, el proceso ha sido más largo y la renuncia se formalizó el pasado 9 de julio. Tampoco está ya en su cargo el interventor delegado del Patronato, aunque la consejera explicó que en este caso la competencia es de la Intervención de la Junta de Andalucía. Sobre el cuarto de los querellados, el jefe de las secciones de Comercialización, Económica y Contabilidad, José María Visedo, Aguilar indicó que se jubila este mes y que en la actualidad se encuentra de vacaciones. La consejera apuntó que los servicios jurídicos de la Junta están estudiando si procede personarse como acusación particular en un caso que todavía está pendiente de ser admitido a trámite por el Juzgado de Instrucción 4. "Hemos pedido el correspondiente informe jurídico para saber si procede personarnos", aseguró Aguilar.