El Servicio de Vigilancia Aduanera de Cádiz se ha incautado en lo que va de año de 14.000 kilos de hachís en la zona de la desembocadura del río Guadalquivir. Sólo con 3.000 kilos más se alcanzaría la cifra de todo el hachís aprehendido por los agentes de la Agencia Tributaria en 2007 en la misma zona, que llegó a los 17.000 kilos. Nueve de sus once actuaciones se han desarrollado en la Costa Noroeste.

Y es que, la bocana del río, que pasa por las localidades de Sanlúcar y Chipiona, continúa siendo la principal entrada de droga por la provincia, al menos, "es donde más detectamos, pero el narcotráfico por el río ha sido así siempre", comenta el jefe de la unidad operativa de Vigilancia Aduanera en Cádiz, que no descarta un incremento producido este año 2008.

A estas actuaciones habría que sumarle las realizadas por la Guardia Civil, que superan también los 15.000 kilos en las que han transcendido durante los últimos meses a la prensa, pero teniendo en cuenta que en ocasiones se trata de operaciones conjuntas. Sin embargo, quizás en la próxima mitad del año presente el ritmo de entrada de hachís no sea tan constante, "depende de la facilidad con la que salgan de Marruecos. Lo mismo en los próximos meses se para la actividad", apuntan desde Vigilancia Aduanera.

Lo que si diferencia los datos de este año del anterior son la cantidad de droga aprehendida por cada alijo. En 2007 cada alijo suponía más cantidad de hachís que este año, pero no porque hayan optado por cargas más pequeñas si no porque, o bien la han tirado al río o no se ha conseguido incautar. El hachís decomisado además en el Guadalquivir llega en mayores cantidades que por otra zona. Como ejemplo, las otras dos operaciones, en la costa de la Janda, suponen sólo 500 kilos. La operación en la zona conileña de Roche -desarrollada por Guardia Civil, Vigilancia Aduanera y Policía Nacional- con tres toneladas confiscadas y unos 15 detenidos, es la única actuación importante que se ha desarrollado fuera de la zona del Guadalquivir este año, aunque quizás sea la más destacable.

La razón por la que el río Guadalquivir sea la ruta preferida por los narcotraficantes puede ser una. "Los narcos controlan muy bien los caños y salidas desde el río, lo que dificulta nuestra labor. Además por los caminos y carreteras de La Algaida y las marismas no suele haber nadie", afirma el jefe de la unidad operativa. "Pero haya más o menos alijo la vigilancia está siempre al cien por cien, dentro de nuestras posibilidades", asegura.