La agencia de detectives contratada por la familia de Mari Luz Cortés ha comenzado a trabajar en el caso, según informó el padre de la menor, Juan José Cortés, aunque no quiso desvelar el nombre del gabinete detectivesco "porque se podría entorpecer su investigación", aunque añadió que "van a trabajar mano a mano con la Policía Nacional para intentar obtener el máximo de información posible que ayude a encontrar a mi hija".

Asimismo, destacó que "estamos ante un caso muy complejo en el que los testigos no han aportado demasiados datos concretos aunque, con lo poco que hay, algún día se sabrá lo que ha pasado con Mari Luz". Cortés añadió que "no se descarta nada, ni siquiera al pederasta que vive en El Torrejón".

El padre de la menor desaparecida el pasado 13 de enero en Huelva comentó que "el hecho de que toda España tenga los ojos puestos en Mari Luz puede perjudicarla en el sentido de que las personas que la tienen deben tener miedo a soltarla y que se les identifique".

Cortés se dirigió a los presuntos captores de su hija pequeña diciendo que "no deben tener miedo de nada porque yo no quiero saber quién ha hecho esto a mi hija, sólo quiero tenerla en casa. Tampoco le preguntaré a ella cuando regrese con nosotros quién le hizo esto".

Afirmando que "encontrar a Mari Luz sería un gran golpe a la delincuencia", Juan José Cortés manifestó que "hay que luchar contra esta lacra porque nuestros hijos no tienen por qué pagar las consecuencias de los desórdenes sociales que hay en España". Con el alma al aire de dolor, indicó que "nos vamos desgastando y, a veces, nos fallan las fuerzas porque el vacío que hay en mi casa no lo llena nadie".

Finalmente, Cortés dijo ante las dos mil personas que apoyaron a la familia durante la manifestación, que "vamos a esperar a mi hija el tiempo que haga falta. La única meta que tengo en mi vida es encontrarla y el dolor más grande que podría yo tener sería morirme sin saber qué pasó con ella, sin encontrarla".