La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha reclamado un "debate nacional" como el que se ha abierto en Andalucía para garantizar un mínimo vital a las familias "que lo están pasando mal", porque las comunidades no pueden poner "parches" en este asunto. En una entrevista en la cadena Ser, Díaz se ha referido a la tarifa eléctrica para reclamar este debate sobre un asunto en el que el Gobierno ha actuado con "oscurantismo, crueldad e insensibilidad" y ha reclamado además al Ejecutivo central "sensibilidad" con Andalucía, porque la comunidad es "cumplidora" y estará "muy cerca" del objetivo de déficit, aunque se lo han puesto "difícil".

Sobre la reforma de la ley del aborto, ha señalado que no da "crédito a esta ley insensible, de la desigualdad, que no reconoce la madurez de la mujer", por lo que ha insistido en que Andalucía pedirá su retirada y estudiará "todos los recursos" para lograrlo, ya que pone en riesgo a la mujer y a los profesionales.

Preguntada por la situación con Cataluña, la presidenta andaluza ha abogado por "fomentar lo que nos une y no alentar las diferencias" y por "ceder todos", abriendo un diálogo para "favorecer el entendimiento, el consenso y el pacto". A su juicio, a España le falta "pacto, diálogo y consenso y le sobra crispación e imponer a la bravas determinadas cosas que están fomentando la polarización de la sociedad", al tiempo que ha reiterado su creencia "en la unidad de España" y respecto al liderazgo en el PSOE ha opinado que "el debate de las personas es secundario".

Díaz ha anunciado una reforma administrativa para hacer más atractiva la región para los inversores y ha reclamado al PP que "ayude" en asuntos como la concertación, para cambiar lo que no funcione, y ha insistido en que será necesario recortes "en todo lo que no impacte en servicios públicos que nos hacen iguales a los ciudadanos".