La presidenta de la Junta, Susana Díaz, y los rectores de las universidades andaluzas concretaron ayer una "hoja de ruta" que marque, a lo largo de este ejercicio, los tiempos del pago de la deuda de 650 millones que la administración autonóma mantiene con las instituciones académicas. La jefa del Ejecutivo mantuvo un encuentro en el Palacio de San Telmo con los rectores, a los que trasladó su compromiso de avanzar en dicho pago "de acuerdo con el marco financiero actual, con las restricciones de Europa y el Gobierno de España".

Díaz también hizo hincapié ante los rectores en la necesidad de articular fórmulas que faciliten el pago de las matrículas a los universitarios en la actual coyuntura de crisis. En este sentido, la presidenta quiere vertebrar institucionalmente, con carácter general, la propuesta que ya rige en varias universidades andaluzas en lo relativo al fraccionamiento de pago de la matrícula en momentos de dificultad. Estos abonos podrían llegar a ser mensuales. El consejero de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, José Sánchez Maldonado, se mostró "seguro" de que "vamos a llegar a un acuerdo bendecido por el conjunto de los rectores".

El rector de la Universidad de Córdoba y presidente de la Asociación de Universidades Públicas de Andalucía (AUPA), José Manuel Roldán, que ejerció de portavoz de los rectores, también destacó el compromiso de una hoja de ruta con la que "tanto con la inclusión en el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) -a lo que la Junta se muestra predispuesta- como con el mecanismo de pago a proveedores podamos ir atenuando la deuda paulatinamente".

La presidenta también invitó a las universidades a realizar sus aportaciones dentro del nuevo modelo de concertación social promovido por la Junta y que, según Sánchez Maldonado, se pretende tener listo para finales de año. Las sedes universitarias han solicitado al Gobiernol regional ayuda para ir "relajando", en la medida de lo posible, la tasa de reposición del 10% ante los impedimentos que ésta supone para la carrera académica de los jóvenes y la "angustia" derivada de la "descapitalización de los recursos humanos" que, a la larga, puede implicar esta medida.

Asimismo, en materia de investigación se hará hincapié en el trabajo entre universidades y grandes empresas tecnológicas, así como en cuestiones relacionadas con la formación. Al respecto, Sánchez Maldonado ha explicado que se trata de "aprovechar la sinergia de los procesos de investigación" para presentar iniciativas en común respecto a centros y políticas del futuro. Y es que, en colaboración con las grandes empresas, surge "la posibilidad de incrementar los niveles de competitividad" de cara a los grandes proyectos europeos.