Al menos de cara a la galería, las relaciones entre la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, y el líder regional de IU, Antonio Maíllo, son más que tensas. Y ayer, una vez más, el coordinador andaluz de la formación de izquierdas aprovechó una comparecencia con los medios para escenificar la profunda brecha que quiere marca respecto a la líder socialista. Así, Maíllo vinculó la estabilidad del Ejecutivo de coalición (PSOE-IU) a un acuerdo entre los dos partidos en los presupuestos de la Junta de 2015 por lo que subrayó, en referencia a la presidenta Susana Díaz, que "no vaya a ser que con tanto yo alguien se quede sola".

Los socios de gobierno de la Junta comenzaron ayer a abordar las negociaciones de las próximas cuentas andaluzas, presupuestos que contarán con la dificultad añadida de que la comunidad no podrá contar, según sus datos, con más de 600 millones -unos 420 millones de la liquidación de la financiación autonómica, y el resto por los ajustes del déficit público-.

"Abordamos la negociaciones para conseguir el acuerdo político de los dos partidos no vaya a ser que alguien con el tanto yo se quede sola. Si hay un acuerdo será producto de las negociaciones entre el PSOE e IU", esgrimió Maíllo en rueda de prensa.

El coordinador andaluz de IU no dudó en señalar que "si hay presupuestos hay gobierno y si no hay acuerdo en los presupuestos no hay gobierno", extremo que definió de "perogrullada", pero, matizó, "no este año sino desde el principio, desde que se firmó en pacto de gobierno".

A propósito del presunto adelanto electoral, afirmó que su formación "está preparada" para cualquier escenario desde que comenzó la legislatura, pero precisó que IU está "concentrada" en las prioridades del Ejecutivo andaluz. "Después que ocurra lo que tenga que ocurrir. Hay que dejar ya de marear esta perdiz", indicó.

De las prioridades de la coalición para los Presupuestos del 2015, el dirigente de IU mencionó la contratación a tiempo completo de los 8.000 empleados del Servicio Andaluz de Salud (SAS), una medida "acogida" por la presidenta. A ésta Maíllo suma la prioridad de convertir las inversiones presupuestarias en un instrumento para la creación de empleo neto y sostenido, así como reforzar la partidas de sanidad, educación y servicios sociales.

Otra de las peticiones de la coalición en la negociación presupuestaria pasa por que el Consejo de Gobierno apruebe el anteproyecto de ley de la banca pública antes que la ley presupuestaria, antes de finales de diciembre.

De esta futura ley saldrá lo que Maíllo denomina Entidad Pública de Crédito, según el grupo de trabajo creado al efecto, que tendría sus objetivos financieros en las pymes, cooperativas y los autónomos.