Los ex presidente de la Junta Manuel Chaves y José Antonio Griñán declararán de forma voluntaria y en calidad de imputados ante el Tribunal Supremo (TS) por el caso de los ERE fraudulentos, una comparecencia que se producirá previsiblemente en febrero.

Después de que el Alto Tribunal mencionase a ambos aforados como "imputados" en un reciente auto, fuentes de la Sala de lo Penal dijeron ayer a Efe que Chaves y Griñán han aceptado implícitamente la condición de imputados cuando pidieron comparecer de forma voluntaria ante el TS. Los ex presidentes solicitaron declarar con la intención de que en esa comparecencia se disipen los posibles indicios y el Supremo considere innecesario solicitar el suplicatorio, archivando la causa contra ambos.

Aunque la juez Mercedes Alaya aseguró en la exposición razonada remitida al Supremo que los hechos podrían constituir indiciariamente delitos de prevaricación y malversación de caudales públicos, las mismas fuentes explicaron que es muy precipitado señalar los posibles delitos y concretaron que la decisión sobre pediro o no el suplicatorio respecto a los aforados podría retrasarse hasta la Primavera, sobre todo tras la convocatoria de las elecciones autonómicas del 22 de marzo, en cuyo proceso no quiere interferir el Alto Tribunal.

La alusión a la "imputación" de Chaves y Griñán en el auto del Supremo generó ayer diversas reacciones, entre las que destaca la de la presidenta de la Junta, Susana Díaz, quien aseguró ayer que cuando este tribunal se pronuncie "si se le imputa un delito a alguien, evidentemente dejará el escaño". En una conferencia de prensa en la Feria Internacional del Turismo (Fitur) en Madrid, Susana Díaz opinó que, a pesar del auto, eso "hasta ahora no ha pasado", y añadió que su afirmación de ahora ya la hizo "con claridad", le "costó dolores de cabeza" y la mantiene.

Por su parte, el consejero de Justicia e Interior de la Junta, Emilio de Llera, insistió en que a su juicio los ex presidentes no están imputados. "No los ha imputado, mientras que no obtenga autorización de las cámaras legislativas no puede hacerlo, por lo tanto, es mentira", aseguró De Llera, que añadió que no cree que el adelanto electoral pueda influir en el desarrollo de estos procedimientos porque, según dijo, "los tribunales llevan su ritmo y los gobiernos los suyos, no tiene por qué influir". "Lo prudente, que es lo que suele hacer el Supremo, es no tomar ninguna decisión durante los tiempos de campaña electoral para no interferir en ella, cosa que no es compartida por todos los jueces como sabemos", precisó el consejero en probable alusión a la coincidencia de decisiones importantes de la juez Mercedes Alaya con los periodos electorales.

La presidenta del PSOE, Micaela Navarro, afirmó ayer en Los Barrios (Cádiz) que "en absoluto" hay una imputación por parte del Supremo a los ex presidentes de la Junta, algo que en su opinión "está muy claro".