El PSOE ha citado a partir de mañana a todos los partidos de la oposición en el Parlamento para negociar la investidura de Susana Díaz. Los tiempos del Tribunal Supremo son distintos a los del Parlamento, y los de éste no deberían diferir mucho de los de la propia Andalucía, necesitada de un Gobierno que deje de estar en funciones. La oposición -PP, Podemos, Ciudadanos e IU- opina que esto último, lo de esta urgencia, es un problema exclusivo de la presidenta Susana Díaz, que fue quien adelantó las elecciones. "La campana de la responsabilidad toca para todos", explicó ayer uno de los negociadores socialistas, aunque si la pregunta se le hace al PP, a Ciudadanos y a Podemos, los tres parecen mirarse entre ellos: nadie tiene la llave del Gobierno. Como la campana del negociador, la llave es compartida, cualquiera de las tres formaciones posee la clave para romper con esta interinidad. No obstante, la línea roja establecida por Podemos y Ciudadanos -la dimisión de los ex presidentes Chaves y Griñán- hace que el Gobierno andaluz no sólo esté pendiente de la negociación política, sino, además, de una decisión judicial que, como poco, no llegará hasta junio, en el límite del plazo para que no haya otras elecciones anticipadas.

El Parlamento se constituye el jueves de la semana próxima, y la candidata a presidenta pronunciará su discurso el 30 de abril, en el límite del plazo legal. A partir de ahí, los partidos tienen dos meses para elegir por mayoría simple a Susana Díaz. Si no es así, la Cámara quedará disuelta de modo automático.

Y a este factor judicial, hay que añadir la cercanía de las elecciones municipales del 24 de mayo. En el PP cunde la sensación de que no habrá acuerdo de investidura hasta conocer cómo quedan la distribución de fuerzas en los municipios y en las diputaciones. En cierto modo, el partido de Juanma Moreno se siente señalado, bastaría su abstención para que Andalucía tuviese un Gobierno. Aunque el PP mantiene que votará que no a Susana Díaz, su presidente, Mariano Rajoy, fue más flexible en la entrevista que concedió a Radio Nacional de España. Su posición es que, primero, hay que escuchar la propuesta de Susana Díaz.

Los socialistas han cerrado la reunión con el PP para mañana, mientras que están a la espera de que Podemos conteste sobre el día y la hora. Este partido es el único que no ha nombrado a ningún futuro parlamentario como miembro de su delegación. Ciudadanos aún no ha contestado, aunque fuentes socialistas explicaron anoche que sí han sido llamados. Los parlamentarios de IU, los antiguos socios del PSOE, no son decisivos por sí solos.