La petición de elecciones primarias para elegir candidatos a las alcaldías en cuatro ciudades andaluzas -Cádiz, Almería, Málaga y Jerez-, peticiones aún no formalizadas y en algunos casos inciertas, ha terminado por sacar a la superficie, sin embargo, tensiones entre la nueva ejecutiva regional del PSOE y algunas direcciones provinciales que no salieron del todo satisfechas del último congreso socialista del que resultó elegido José Antonio Griñán. Aunque el también presidente andaluz obtuvo un respaldo unánime, el PSOE vive tiras y aflojas soterrados que ahora están aflorando con el debate abierto para la elección de los candidatos. Estas fricciones se agravaron con la composición del segundo Gobierno de Griñán.

En Almería y Cádiz, críticos con sus direcciones provinciales han solicitado primarias, mientras en Málaga son los descontentos con la ejecutiva regional y el señalamiento de María Gámez, delegada del Gobierno, como candidata, quienes han reclamado apoyo para estas elecciones a través de Facebook. Para confrontar dos listas, es necesario que los opositores a la oficial reúnan un 20% del apoyo de la militancia. El vicesecretario general socialista, Rafael Velasco, ha querido poner un poco de calma a este debate, con el argumento de que las primarias son un instrumento avalado por los estatutos socialistas y, por tanto, normales. Sin embargo, la opinión instalada en el partido es que este tipo de comicios son la antesala del fracaso electoral, porque evidencian diferencias que luego no son comprendidas por el electorado.

Pero a todo ello, hay que unir la irrupción del secretario de Política Institucional a nivel nacional, Gaspar Zarrías, quien el viernes pasado en Córdoba mantuvo que desde Andalucía no se había solicitado un adelanto de la proclamación de los candidatos. Esta solicitud, sin embargo, es conocida y lleva meses en la prensa, aunque la dirección federal, en la que está Zarrías, se muestra muy reticente a adelantar del calendario. Las declaraciones de Zarrías provocaron una desautorización (en forma de comunicado, algo inédito) de la secretaria de Organización, Susana Díaz, que no hace sino confirmar que el PSOE andaluz no es una balsa de aceite. De algún modo, lo que ha terminado por aflorar ahora es una lucha por el reequilibrio de fuerzas entre la nueva ejecutiva de Griñán y, al menos, algunos de los dirigentes de la vieja guardia de Manuel Chaves.

A pesar de las declaraciones de Zarrías, la dirección regional del PSOE confía en que la Ejecutiva federal le autorice a publicitar quiénes son sus candidatos preferidos en las ciudades de más de 50.000 habitantes donde no gobiernan, un anuncio que podría producirse en mayo si Ferraz acepta. No obstante, el señalamiento, que sería previo al proceso estatutario de elección, sólo se produciría en aquellas ciudades donde hubiera un claro consenso, algo que sea da, al día de hoy, en Sevilla, Huelva, Granada y Málaga. En ciudades más polémicas como Cádiz, Almería o Algeciras, la regional quiere esperar a conocer unas encuestas que acaba de encargar.

Lo más grave ha sucedido esta semana en Almería, donde José Antonio Amate, antiguo guerrista y portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, cargó contra la honestidad del candidato oficioso de la dirección provincial, Antonio Cantón, un prestigioso empresario del sector de las telecomunicaciones, impulsor de Jazztel, y actual concejal.

José Antonio Amate manifestó el miércoles que Cantón no era la persona "más idónea"; que se debía buscar un candidato "digno, respetable y libre de cualquier atadura", a la vez que mostró su decepción porque "creí que, en su momento, iba a renunciar, como así me dijo, a todos sus negocios, y no sólo no lo ha hecho, sino que los ha ampliado". En la dirección regional no han gustado las críticas de Amate y han negado que, de alguna manera, estuvieran inducidas por ninguno de sus miembros. Sin embargo, el crítico Amate dejó clara su filiación cuando el jueves manifestó que "la llegada de Griñán a la secretaría general del PSOE supuso un fuerte renacer de la ilusión socialista en la comunidad autónoma con la excepción de nuestra provincia donde es una lección que no se ha aprendido". Toda una carga de profundidad contra el secretario provincial, Diego Asensio, el hombre al que el ex consejero Martín Soler legó el poder. La dirección almeriense asegura que Cantón es sólo uno más de los posibles candidatos, aunque siempre se sobreentendió que era el favorito.

Un caso similar es el de Cádiz capital. Su secretario local, Federico Pérez Peralta, fue amonestado por el propio Pepe Griñán cuando anunció que la concejala Marta Meléndez debía ser la candidata para confrontar con la alcaldesa Teófila Martínez (PP). No obstante, tanto Pérez Peralta como el secretario provincial, Francisco González Cabaña, siguen prestando un apoyo público a esta concejala, aunque hayan dejado de mencionarla expresamente como candidata. El viernes pasado, por ejemplo, el PSOE local emitía un comunicado con el siguiente encabezamiento: "La agenda institucional del Ayuntamiento de Cádiz ya la marca la concejala socialista Marta Meléndez". Emilio Aragón, un ex directivo de Cajasol muy conocido en Cádiz, declaró a este medio que recurrirá a las primarias una vez que la ejecutiva federal platee la programación. "Oída la preferencia de mi secretario local, no me queda otro remedio que presentarme a las primarias, hay gente que lo pide y yo quiero", explicó Aragón a este periódico. "No vivo de la política ni me hace falta, lo hago por convicción y creo que soy una de las personas más prudentes que hay en el PSOE de Cádiz, no deseo ninguna polémica con mi partido", mantuvo Aragón.

En Cádiz, los críticos con la gestión del secretario provincial, Francisco González Cabaña, se han alineado con la nueva dirección regional de Griñán, mientras que los oficialistas ven en ellos un intento de Sevilla de hacerse con sus territorios. En Algeciras también hay un deseo de la dirección provincial para que el actual alcalde, Tomás Herrera, no se presente a la reelección, porque desconfían de sus posibilidades electorales. En Jerez, su alcaldesa, Pilar Sánchez, enfrentada a González Cabaña, parece estar confirmada por la dirección regional, aunque Izquierda Socialista también quiere acudir a las primarias. Cádiz y Almería son casos similares, provincias que perdieron mucho peso en congreso del PSOE y en el Gobierno, y que se califican como las "conflictivas" por parte de la dirección regional.

En Málaga, la dirección provincial, dirigida por Miguel Ángel Heredia, muy afín a José Antonio Griñán, ha propuesta a la delegada del Gobierno, María Gámez, como candidata, lo que supuso eliminar de la lista a José María Martín Delegado como favorito. La causa por la que se prescindió de este ex consejero de Cultura es que no aseguraba que pudiera completar el mandato de cuatro años en la oposición en caso de perder las elecciones. Un grupo, capitaneado por Ignacio Trillo, ex delegado de Medio Ambiente, ha abierto una página en Facebook a favor de las primarias. En este caso, los críticos están un tanto huérfanos por cuanto el consejero de Turismo, Luciano Alonso, se ha posicionado claramente a favor de María Gámez.