Joan Plaza llegó por segunda vez a Málaga. Después de su venida para ser presentado y volver a irse para terminar de hacer la mudanza desde Lituania y comenzar sus vacaciones, ayer vino para no irse más. Se puso oficialmente a los mandos de la nave del plantel con un tema preferente sobre los demás: la elección del jugador que vendrá a terminar de apuntalar el juego interior. El flamante técnico cajista no quiere que se alargue más la situación, el trabajo de pretemporada ha comenzado y quiere tener su plantilla cerrada inmediatamente.

La situación no ha diferido mucho en las últimas horas a pesar de que el entrenador barcelonés mantuvo un encuentro con miembros del Consejo de Administración y la dirección deportiva. Ahí está el reciente fichaje de Hettsheimer, si bien Plaza sigue decidido a encontrar otra alternativa que refuerce el juego en la pintura. Parece que el peinado de mercados que ha efectuado la dirección deportiva ya no da para más, si bien dados los precedentes este verano con el nuevo entrenador no se puede descartar ningún viraje de última hora que pueda poner a tiro a nuevos jugadores que terminen de contentar a Plaza.