Carlos Suárez se muere de ganas por jugar, pero aún debe esperar alguna semanas más. El alero madrileño estuvo ayer en la tertulia de la Cadena Ser en el Restaurante Dehesa de Santa María y habló de su situación. "Yo me siento para entrar ya en el grupo, pero el precedente dice que el gemelo es el músculo más traicionero que hay y aún no me dejan. Este jueves [por mañana] pasaré una nueva ecografía y ya sabremos algo más preciso. La idea es viajar la semana que viene a Moscú y Badalona (viernes y domingo) para ir integrándome", dice Suárez, que ha sido advertido por el cuerpo médico de que "tardaré en coger la forma un poco y me sentiré desubicado al principio por no haber hecho la pretemporada completa, pero será cuestión de tener paciencia".

Cuestionado sobre su renovación por el Unicaja, de la que se viene hablando desde el verano, Suárez dijo que "con la lesión lo paralizamos todo, la idea ahora es recuperarme cuanto antes y volver a jugar. El club ya sabe que mi deseo es quedarme en Málaga, pero tenemos que hablar", aseguró. Las conversaciones circulan por buen camino y ambas partes ven con optimismo la ampliación del vínculo. Suárez quiere, el club también y Plaza, que anhela su vuelta, por supuesto.

Suárez también dijo que ve "muy lejano" el tema de regresar a la selección española. "Me concentro en trabajar para mi club", asegura. También expresó que ve una plantilla "más equilibrada y complementaria seguramente que el año pasado, con más jugadores capaces de hacer cosas distintas aunque se haya marchado gente de calidad". Suárez se despidió anhelando que el público vuelve a llenar el Carpena "como en el play off o cuando venía a jugar con el Estudiantes o el Madrid".