Primero fue Juanmi. Luego tomó el testigo Samu Castillejo y, hasta ayer, Sergi Darder era el último canterano que había renovado su contrato con el Málaga. Con Recio se cumple el póquer de renovaciones de malagueños o jugadores formados en las categorías inferiores. El club anunció ayer la culminación de unas negociaciones que estaban al borde del remate, la que ampliará la vinculación del centrocampista malagueño hasta junio de 2018. La semana que viene está previsto que el futbolista comparezca públicamente para explicar sus sensaciones tras llegar las negociaciones a buen puerto.

Así que el proyecto de inversión razonable y apuesta por la cantera continúa tomando cada vez más cuerpo visible. De hecho, el próximo anuncio oficial tendrá lugar en breve espacio de tiempo, el de la continuidad de Juanpi Añor, que acaba contrato en junio, por cuatro años más. Las gestiones con el agente del venezolano están más que avanzadas. El último de los malagueños es Samu, con quien no ha habido contactos esta temporada aunque también fue blindado hace un año y medio, con un contrato que le tendrá ligado a la entidad de Martiricos hasta junio de 2016 y con la opción de prorrogarlo uno más.

Hace unos meses, el director deportivo, Mario Husillos, aseguró públicamente que la apuesta por la cantera sería muy real a medio y largo plazo. Por entonces los dos Samus todavía no se habían afianzado en el once de Javi Gracia y Juanmi había demostrado detalles, pero no había roto a hacer goles. Ya a corto plazo se está notando esa apuesta, que es un deseo histórico de los dirigentes, una necesidad desde el punto de vista económico y una convicción para el entrenador blanquiazul. El público de La Rosaleda anda bastante contento con el rendimiento de su equipo, pero también con el hecho de ver tantos malagueños y canteranos en el once, puesto que hace bastantes temporadas que la presencia de estos en la alineación no tenía lugar.