El capítulo de incorporaciones para el mercado de invierno parece cerrado. Aún queda esta semana por si el club se descuelga con alguna sorpresa que no se espera. De hecho, el director general, Vicente Casado, y el director deportivo, Mario Husillos, actualmente tienen copados todos sus esfuerzos en la contratación de Arambarri para la próxima temporada. Ambos andan haciendo las gestiones necesarias para atar su pase, que no está nada fácil. A pesar de la diligencia del Málaga para llegar a él, varios factores pueden hacer peligrar su llegada a partir de la próxima temporada.

Uno de ellos es la copropiedad de los derechos del futbolista. Defensor, club en el que juega, vendió hace unas semanas el 70% de su pase (por una cantidad en torno a 1,2 millones) a un fondo de inversiones, por lo que el Málaga podría disfrutar del centrocampista, en caso de firmarlo, de una manera similar a la que hace con Ricardo Horta. De hecho, la forma de acercarse al futbolista ha sido similar a la que en su día hicieron Casado y Husillos con el futbolista luso.

Otra de las cuestiones que podría complicar su llegada es el campeonato sudamericano sub 20, en el que Arambarri se está mostrando como uno de los futbolistas más destacados de la selección uruguaya. A pesar de que se emplea como medio centro, ya suma dos goles en el torneo, lo cual le ha llevado a hacer más ruido del que hubieran querido los dirigentes blanquiazules. Varios equipos han activado la alerta sobre él y estarían dispuestos a hacerse con el futbolista, cuyo fondo de inversión pretende que dé el salto a Europa para que continúe con su progresión y se revalorice. Uno de los que puja fuertemente por él, según pudo saber este periódico, es la Juventus, que gusta de apostar por futbolistas así para que se fogueen hasta alcanzar su punto de madurez. Aunque desde el Málaga creen haber empezado la negociación a tiempo, estos intereses podrían encarecer la operación.