Holanda se enfrenta hoy a algo más que un partido amistoso ante España, ya que el desprestigio de la selección parece no tener fin y su fútbol recibe durísimas críticas incluso del gran ídolo nacional, Johan Cruyff.

El legendario ex delantero considera insoportable el juego que practica el equipo dirigido por Guus Hiddink y calificó el afortunado 1-1 ante Turquía el sábado como la última prueba del hundimiento del fútbol holandés.

"Hay que cambiar algo a toda prisa porque este fútbol hace daño a los ojos", comentó el ex entrenador del Barcelona en su columna semanal del diario De Telegraaf publicada ayer.

No sólo es que la selección corra peligro de quedarse fuera de la Eurocopa en la clasificación, sino que los clubes holandeses también pasan por un mal momento en las competiciones europeas, donde han perdido todo el potencial que llegaron a tener tanto el Ajax como el PSV Eindhoven e incluso el Feyenoord, que también fue campeón de la Copa de Europa, aunque hace 45 años.

"No contamos en ningún sitio y me pregunto cuándo van a sonar finalmente las alarmas", advirtió Cruyff, en cuya opinión la causa de los problemas está en la formación de los jugadores y en los entrenadores.

Holanda, que fue tercera en el Mundial de Brasil, soló pudo empatar el sábado en el tiempo de prolongación ante Turquía, en partido clasificatorio para la Eurocopa de 2016.

También otros comentaristas y medios de comunicación se quejaron ayer del "vergonzoso partido" de la selección y de la pérdida de prestigio en Europa. Y no parece probable que Hiddink pueda lograr hoy el cambio radical que exigen fans y crítica en el partido contra España en Ámsterdam.

No obstante, el técnico se mostró el sábado optimista. "Por supuesto que lograré poner en marcha a este equipo. Pero no sé todavía cómo", admitió el entrenador, que contra España planea dar una oportunidad a otros jugadores menos habituales en sus alineaciones hasta ahora.

La prensa subrayó también que la selección ha perdido calidad por las bajas por lesión de dos piezas clave en su ataque: el extremo Robben, del Bayern Múnich, y el delantero Van Persie, del Manchester United. Ninguno de los dos podrá jugar tampoco contra España.

Pero según escribió De Volkskrant, Hiddink sigue teniendo responsabilidad en el "juego sin alma" del equipo: "Él es el entrenador, él es el responsable". El puesto del seleccionador está en peligro prácticamente desde el comienzo de la errática clasificación el pasado octubre. Ahí ya comenzaron los rumores sobre Hiddink.

Sin embargo, la Federación Holandesa de Fútbol (KNVB) le expresó su confianza. Y este fin de semana, los jugadores también respaldaron al sucesor de Louis van Gaal, bajo cuyo mando el equipo alcanzó las semifinales del Mundial de Brasil.

El 5-1 con el que Holanda humilló a España en el primer partido de la Copa del Mundo parece ahora a años luz.