El Barcelona recibe al Paris Saint-Germain en el Camp Nou con el deseo de lograr una clasificación tranquilo a las semifinales de la Liga de Campeones. Su ventaja es clara tras el triunfo logrado por 1-3 en la capital francesa la pasada semana, donde demostró ser muy superior al equipo galo. Ahora, con semejante ventaja -el rival necesita, como mínimo, marcar tres goles- y el apoyo de su afición, es gran favorito para entrar entre los cuatro mejores de Europa, aunque en el club no se fían.

No en vano, Luis Enrique avisó en la rueda de prensa de que ni así quiere confianzas. "Es un buen resultado, pero no definitivo. Lo hemos dicho y es la realidad. Necesitamos otro gran partido para solventar esta eliminatoria", aseguró el técnico azulgrana en la previa del choque.

Para ello, para firmar otro gran encuentro, contará con un equipo muy parecido al del duelo de ida, aunque recuperará al lateral brasileño Daniel, sancionado la semana pasada. Dado que Iniesta sufre unas pequeñas molestias, es posible que el capitán del equipo, Xavi, entre en su lugar.

Pocos cambios más se esperan del entrenador asturiano, que seguirá apostando en el ataque con el tridente compuesto por Messi, Neymar y Luis Suárez, la línea más temible del cuadro azulgrana. El uruguayo fue el gran protagonista de la cita en el Parque de los Príncipes con dos goles espectaculares y está siendo decisivo durante el último mes con tantos muy importantes tanto en la Champions como en la Liga .

El PSG, por su parte, llegará al Camp Nou en una situación desesperada. El primer objetivo del equipo francés será mejorar la imagen transmitida en el primer encuentro, en el que fue superado desde el primer minuto por los catalanes. Luego, el propio desarrollo del choque dirá si existen argumentos suficientes para pensar en una histórica remontada.

Su técnico, Laurent Blanc, recuperará al delantero sueco Ibrahimovic y el centrocampista italiano Verratti, dos piezas básicas en su esquema que se perdieron la ida por sanción. En cambio, no podrá contar ni con el medio centro Motta, quien ya se perdió la ida, ni con el central brasileño Thiago Silva, que se lesionó en el duelo ante el Barcelona y no se recuperó a tiempo.

Blanc deberá resolver si ambiciona la remontada o si se conforma con mejorar la imagen del equipo. Si es ambicioso, alineará una delantera formada por Ibrahimovic, Lavezzi y Cavanni. Y si es más conservador, podría dejar en el banquillo al uruguayo para armar un centro del campo compuesto por Verratti, Cabaye, Blaise Matuidi y Pastore.

En cualquier caso, todo lo que no sea un pase tranquilo del Barcelona será una sorpresa. La clasificación para las semifinales de la Liga de Campeones sería la séptima en las últimas nueve temporadas para un equipo que espera no sufrir y recuperar las mejores sensaciones para el tramo final de la temporada.