El Unicaja no ha parado a lamentarse por la pérdida de John Bryant y ha activado las siguientes opciones en la lista de prioridades para fortalecer el juego interior. Y en un lugar preferente de ellas está el jugador griego Loukas Mavrokefalidis, que en las dos últimas temporadas ha militado en el Panathinaikos. Con 31 años (los cumplirá el día 25) y 2.10 metros, Mavrokefalidis queda libre y el equipo ateniense, que acaba de firmar como nuevo entrenador a Sasha Djordjevic, aún no le ha renovado para la próxima temporada. Sabida es la inestabilidad económica existente en Grecia y que ya han salido algunos jugadores, como Kostas Sloukas rumbo al Fenerbahce. Málaga es una opción atractiva para el jugador.

Mavrokefalidis, criado en la prolífica cantera del PAOK de Salónica, tiene experiencia en los dos grandes clubes helenos (Olympiacos en dos etapas y ahora en el Panathinaikos), en Italia (Lottomatica), Rusia (Spartak de San Petersburgo) y en Valencia y Barcelona, donde jugó temporadas incompletas tras llegar como temporero. Tiene sobrada experiencia de seis campañas en la Euroliga y conoce la Liga Endesa, lo que le da un plus a la hora de acelerar la adaptación si se produjera la llegada.

El PAO está en reconstrucción tras una temporada un tanto vacilante en las manos de Dusko Ivanovic y Djordjevic tiene manos libres para construir un nuevo equipo que destrone al rey de las últimas temporadas en Grecia, el Olympiacos. Mavrokefalidis es un jugador interesante para el Unicaja, en ese papel de cinco que se busca para completar la plantilla una vez la posibilidad de John Bryant se esfumó porque el Bayern le ofreció la renovación. Es un jugador móvil y ágil pese a su estatura, capaz de defender a jugadores más bajos, algo que a Golubovic le costaba más. En la última temporada en el Panathinaikos promedió 9.3 puntos y 4.7 rebotes en la HEBA y 7 puntos y 3.3 rechaces en la Euroliga.

Los contactos entre el Unicaja y los representantes han existido aunque están en fase incipiente porque el no de Bryant fue reciente. Pero habla bien de la planificación del club malagueño a la hora de afrontar distintos contratiempos. Es verdad que el pívot americano le podía dar otra dimensión al juego de ataque cajista, pero también que sus características son particulares y que existía cierto riesgo. Mavrokefalidis es un jugador de caché e interesante.

Otras de las opciones que se habían barajado era el alemán Maxi Kleber, que ya ayer justamente firmó por el Bayern de Múnich por dos temporadas. El ala-pívot alemán compró su libertad con el Obradoiro, donde destacó la temporada pasada, y es libre para regresar a su país. El Unicaja contactó con su agente para conocer la situación tras haberle seguido durante la temporada en el equipo gallego, pero la opción se fue, reclutado por el Bayern de Múnich, que el año pasado ya birló a Dusko Savanovic y esta temporada ha convencido al citado John Bryant, objetivo del equipo cajista, para que siga una temporada más. Pero el Unicaja tiene alternativas.