Cada partido que pasa el Málaga muestra virtudes y carencias nuevas. La pretemporada es así, aburrida en cuanto a espectáculo y algo obsesiva para los amantes de la preparación física y el reparto de cargas para alcanzar el nivel óptimo en el momento clave de la temporada. En esas anda el equipo de Javi Gracia, que gustó más al navarro que ante el Deportivo Cali. Quizá por el hecho de no encajar goles y por el buen nivel mostrado por Amrabat durante todo el choque. El internacional marroquí fue nombrado MVP del encuentro y dejó bien clara la importancia que va a tener esta temporada para el buen funcionamiento de la plantilla.

Cambió en gran medida el once Gracia para este envite. La carencia de entrenamientos y el reparto de minutos permitió ver a Pol bajo palos, a una interesante pareja de centrales con Angeleri y Filipenko, destacando sobre todo el bielorruso, que presentó su candidatura a la titularidad. Volvió a probar con Juan Carlos en el lateral izquierdo, mientras que Rosales y Horta gozaron de sus primeros minutos tras las vacaciones.

Arriba, le tocó a Duje Cop defenderse solo en la punta del ataque. Ofrece alternativas a Charles, pero parece que el ariete será cosa del ex celtiña, que en lo poco que jugó estrelló un balón en el palo. Como Espinho, que intentó dejarse ver desde el inicio pero sin demasiada suerte.

Recio, ya recuperado de las molestias, portó el brazalete y la manija del centro del campo. El malagueño está gozando de bastante protagonismo en la pretemporada ante la lesión de Camacho. Gracia quiere darle confianza y procurar la mejor versión del centrocampista para este curso.

Pero saltando los detalles tácticos, el partido no tuvo historia ninguna. La tanda de penaltis, previo gol anulado a los locales en el descuento, irrumpió para despertar del sueño a los aficionados malaguistas que optaron por trasnochar para ver el cuarto amistoso del Málaga. Entonces apareció Tissone, con un penalti a lo Panenka que convirtió la valentía en ridículo en cuestión de segundos. Los matices del fútbol. El argentino quiso lucirse en casa y acabó sonriendo ante una pifia que, sumada a la de Charles, dejó al cuadro blanquiazul sin triunfo. San Lorenzo, plagado de suplentes, tumbó al Málaga en los penaltis. A los puntos, Amrabat le dio más a los malagueños y es la valoración más positiva que se lleva Gracia de su paso por Buenos Aires.

"A todos nos gusta acabar la victoria, pero hemos hecho un partido bastante completo. Vamos a más cada día en nuestra preparación y, dentro de la dificultad que conlleva progresar con tanto cambio y viaje, se ha hecho un buen partido. Había un rival enfrente que no presentó su 11 titular, pero que tiene un gran plantilla. El empate ha sido positivo, hacemos un buena valoración, hemos tenido dos ocasiones muy claras con los dos palos, estoy satisfecho con el rendimiento. Vamos recuperando jugadores y ofreceremos una mejor versión poco a poco", reconoció el navarro.

Por su parte, Tissone, triste protagonista de la tanda, admitió lo especial que fue volver a jugar en casa ante su gente. "Éste es uno de los partidos más especiales que he jugado, por ser el primero en mi país", explicó. Otro de los argentinos del equipo, Angeleri, disfrutó del regreso a Argentina y analizó el momento que atraviesa el plantel: "Estamos apostando a la parte física pero cumplimos y tratamos de que nos sirva para mejorar".