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El póquer de Guardiola

  • El Bayern, con su técnico discutido, busca su cuarto título consecutivo en la Bundesliga más latina

Más hispano y latino que nunca, el todopoderoso Bayern Múnich al mando de Josep Guardiola buscará a partir de hoy quedar en la historia como el primer equipo alemán que cosecha cuatro títulos de Liga consecutivos.

"Sería un buen objetivo", estimó Guardiola en su tercer -y hasta ahora- último año al mando del Bayern, que parte como gran favorito en la edición número 53 de la Bundesliga. "Estos jugadores lo pueden conseguir", opinó el técnico, quien aún medita si continuará sirviendo al campeón alemán tras esta campaña.

Con el nuevo récord y el título liguero 26 en la mira, Guardiola buscó el refuerzo de dos jugadores que ya dieron muestras de calidad en sus primeras actuaciones: el chileno Arturo Vidal y el brasileño Douglas Costa. Vidal, flamante campeón de la Copa América, fue fichado por 35 millones de euros y en sus primeros compromisos mostró ya su habitual intensidad. Otros 30 millones de euros invirtieron los bávaros en el brasileño Costa, que se perfila como el mejor fichaje de la Liga. Veloz, de gran regate y olfato de gol, el extremo dio señales en los amistosos de que podrá reemplazar en las bandas a Robben o Ribery.

Vidal y Costa se suman a un plantel del Bayern muy hispano y latino, con los españoles Thiago Alcántara, Javi Martínez Xabi Alonso y Bernat y los brasileños Dante y Rafinha.

Nadie en Alemania cree que el Bayern pueda ser destronado. En la temporada pasada se redujo un poco la diferencia frente a sus seguidores debido a las múltiples lesiones, pero los refuerzos y el regreso de Alaba o Robben dan idea de lo difícil que será desafiarlos, aún cuando siga aquejado del pie Ribery y en rehabilitación el zaguero Badstuber.

El Bayern dará el puntapié inicial de la nueva temporada con un choque en casa contra un tradicional rival como el Hamburgo. El conjunto del norte tiene muy malos recuerdos del último duelo ante el Bayern, que le infligió un 8-0 y su mayor derrota. El Wolfsburgo se hizo con el subcampeonato y con la Copa Alemana, y acaba de vencer al Bayern en la Supercopa por 5-4 en los penaltis tras 1-1. En sus filas brilla el belga De Bruyne, cuya permanencia no está asegurada. El Wolfsburgo recibe en su cancha al Eintracht, que no le debería dar grandes problemas.

Otro equipo que quiere ser protagonista es el Borussia Dortmund, gran decepción de la campaña pasada. Partió como el principal adversario del Bayern, pero enfrentó muchas lesiones y perdió fuelle hasta quedar temporalmente en el último puesto. Sobre el final se recuperó y quedó en un puesto de clasificación para la Liga Europa. El carismático Jürgen Klopp sacó sus propias conclusiones de la malograda temporada y dejó el equipo para tomarse un año sabático. Su lugar lo ocupa ahora una gran promesa, el ex técnico del Mainz Thomas Tuchel, un obsesivo analista y fanático admirador de Guardiola, que aspira a devolver el lustre al club. Tuchel se estrenará mañana ante la propia hinchada contra el Mönchengladbach en otro de los platos fuertes de la primera jornada.

El Mönchengladbach, el Leverkusen y el Schalke no serán competencia para el Bayern, pero se disputarán los peldaños superiores de la tabla. El Gladbach a las órdenes del suizo Lucien Favre quedó tercero y está en condiciones de asegurarse nuevamente un lugar en la Champions. También podría conseguirlo el cuarto de la campaña pasada, el Leverkusen, que recibe al Hoffenheim.

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