La rueda de prensa posterior a la derrota ante el Barcelona es buen ejemplo de la indignación que existía en el seno del Unicaja por el arbitraje padecido por Pérez Pérez, Peruga y Rial en el Martín Carpena. Especialmente el árbitro principal centraba la ira del club malagueño. Dolió esa técnica a Nedovic por supuesta simulación. El colegiado gaditano estaba a apenas dos metros de la jugada y las imágenes demuestran cómo Doellman contacta con su codo en el rostro del serbio. Más decisivo fue el lance a un minuto del final y con el marcador empatado, cuando Hendrix luchaba por Tomic por ganar la posición y señalaron falta del norteamericano. En un momento en el que el contacto se permitía a altos niveles, sucedió durante todo el segundo tiempo, se bajó el listón de manera dramática para quitar una posesión clave para el Unicaja.

Ayer se produjo una comunicación telefónica entre el secretario técnico, Carlos Jiménez, y el director de arbitraje de la ACB, el ex colegiado Paco Monjas, en la que el Unicaja transmitió al estamento las quejas formales por lo que sucedió en la pista el pasado domingo. El distinto rasero con los dos rivales fue lo que enojó especialmente a Joan Plaza y al resto de la entidad. Las consecuencias del partido se verán más a largo plazo. La comunicación es una manera de hacerse respetar y hacer constar el descontento en Málaga con la labor arbitral. El visionado en el día después del vídeo no cambiaba la percepción del pasado domingo. Asumiendo los errores propios, como ese primer tiempo lamentable, en el Unicaja se entiende que los árbitros fueron trascendentes en el partido.

Tras el descanso de ayer, hoy toca volver al tajo con una larga sesión clásica del martes, en la que se funden el vídeo, el gimnasio y el trabajo en pista. Vienen tres partidos en cinco días, de viernes a martes. Y toca apretar los dientes.

Germán y la vía venezolana

Germán Gabriel sigue ejercitándose con el Unicaja a la espera de encontrar un destino que le satisfaga. El pívot malagueño no tiene reparos en hacer la maleta, como ha demostrado repetidamente a lo largo de su carrera, y escucha ofertas. Ya estuvo en Venezuela en 2014, donde ganó el título con el Marinos de Anzoátegui. En el país sudamericano se habla de su inminente llegada, pero Germán aún madura la proposición realizada del otro lado del Atlántico. Varios clubes de ACB han mostrado interés en sus servicios y el pívot malagueño estudia proposiciones. La vía venezolana está ahí.