Inesperado batacazo del Clínicas Rincón. Después de dos magníficos partidos en Ávila y con el factor cancha robado, se bloqueó en Torremolinos y encajó una derrota dolorosa en el tercer partido de las semifinales de ascenso a LEB Oro (56-79). Un nefasto arranque hizo ir a remolque al jovencísimo equipo malagueño desde el inicio y no vio la manera de desarticular, como lo había hecho en Ávila, a su rival. Karahodzic (13 puntos y 8 rebotes) y Romaric (15 tantos y 7 rechaces) fueron los mejores. La eliminación está ahora a una derrota.

El Clínicas empezó con el pie izquierdo el partido. Como si el equipo estuviera presionado por ver San Miguel lleno, no se empleó con el mismo descaro y competitividad que en los dos partidos en Ávila o en la anterior eliminatoria. El Carrefour, sin hacer virguerías en ataque, supo poner tierra de por medio desde el inicio. Hasta 4-20 fue el parcial de arranque. Paco Aurioles buscaba soluciones, pero el Clínicas estaba muy acelerado y no era capaz de producir ofensivamente. Así, se llegó al final del primer cuarto con un marcador de 8-23.

Apenas Romaric Belemene era capaz de producir con cierta continuidad (siete puntos y cinco rebotes al descanso), pero la tendencia colectiva continuó. Si sólo metió ocho puntos el equipo malagueño en el primer cuarto, repitió en el segundo. No obstante, una mejora defensiva en un cuarto con poco acierto (8-10) permitió aguantar la sangría. Enfrente, Marzo y Sebirumbi hacían daño. El partido estaba muy cuesta arriba al descanso (16-33).

Si había alguna esperanza, el Carrefour se encargó de eliminarla tras el descanso. No surtieron efecto las órdenes de Aurioles. El equipo castellano metió cuatro triples consecutivos para elevar la diferencia por encima de los 25 puntos (24-50). Pese a que no se le podía reprochar el esfuerzo y a que Karahodzic se entonaba, el partido ya estaba sentenciado al final del tercer cuarto (33-57).

La diferencia llegó a 30 puntos (33-63), pero el Clínicas recortó distancias para pensar ya en el partido de mañana (12:30).