No le están sentando bien los derbis al Málaga en esta recta final de campeonato, tanto que ayer cosechó su segunda derrota consecutiva en Ronda (3-0), traspiés que se suma al del pasado domingo en El Viso ante el Vélez. El varapalo de la Serranía le costará, muy probablemente, la cuarta plaza a los de Rafa Gil, pues el Baza, quinto con los mismos puntos que los pupilos blanquiazules, juega en el Constantino Navarro y eso esta temporada es sinónimo de éxito, sea cual sea el rival. Hoy es el Comarca de Níjar.

La derrota del B fue tan contundente que no admite apelación. El Ronda, que quería olvidar la manita que le hizo el Almería B en el Juan Rojas, ha convertido el Municipal en un fortín en las últimas jornadas y ya asusta a todo aquel que enfila la carretera serrana. No en vano, cuenta por triunfos sus últimos cinco partidos como local, virtud que le ha permitido dejar atrás los fantasmas del descenso y viajar cómodamente en el eje de la tabla, lástima que se le atragante tanto lo que se juega lejos de Málaga.

Fue un partido poco vistoso en el que no acompañó ni la climatología ni el estado del terreno de juego y, acorde con los derroteros que condujeron el choque, los tres tantos llegaron a la contra. Tres latigazos de la armada local que noquearon a los malaguistas, muy castigados por el rápido brazo de Lorenzo Vilches y su apego por el amarillo. El primer zarpazo lo propinó Diego a los 38 minutos y Corbacho sentenció poco antes del intermedio. La segunda mitad, sin mucha historia, apenas dejó destello alguno, si acaso el de Melquiades, autor del 3-0.