Las enseñanzas del 'siete'
Rondón explota el desmarque al primer palo de Raúl que le sugirió Pellegrini
Manuel Pellegrini fue el primer entrenador en dar el rol de suplente a Raúl. Vista la temporada que el siete está realizando en el Schalke 04 podría parecer una locura. Más aún si se tiene en cuenta la trayectoria en la casa blanca del que puso el nombre del aguanís a uno de sus regates más característicos y que sirvió una Intercontinental para sus vitrinas. Este último argumento, el de la tradición, fue una de las muchas cuentas pendientes que cierto sector mediático de la capital de España quiso hacer pagar al técnico chileno en su única temporada al frente del Real Madrid. Razones más pueriles no encontraban. Sin embargo, y pese a la gran presión a la que se les sometió, de la boca del actual entrenador del Málaga, ni de la de su ex jugador, han salido palabras de reproche contra el otro. Más bien al contrario, donde los elogios y reconocimientos por ambas partes han sido la constante cada vez que han sido cuestionados.
Una prueba de esa admiración recíproca la ha dado el mismo Pellegrini en Málaga, adonde se ha traído el mortífero desmarque de Raúl al primer palo. Y, aparte del equipo, el gran beneficiado de ello es José Salomón Rondón.
El ariete venezolano ya lo confirmó tras estrenarse gracias a esta faceta ante la Real Sociedad: "El míster me ha puesto estos días un ejemplo muy claro, que es el de Raúl, que siempre va rematar al primer palo. Yo no estoy muy acostumbrado pero ahora intento hacerlo más veces y hoy me ha salido bien". Ese, a primera vista sencillo, desmarque supuso el 0-2 del Málaga en Anoeta, el gol que significaba la tranquilidad en ese partido y el arranque de una racha que ha llevado al equipo hasta acariciar la salvación.
No ha sido ahí la única ocasión en la que el internacional vinotinto ha sacado partido a esta acción de manual. En las jornadas posteriores también ha tirado de esta técnica y con una incidencia bastante respetable en la victoria del sábado ante el Atlético de Madrid. Así se desplazó en diagonal entre los centrales rojiblancos para ganarles la partida en el primer palo y asestar el cabezazo que supuso el 0-1.
Este movimiento de arrastre también ayudó lo suyo a que Baptista pudiera lograr el segundo gol del equipo en el estadio de la ribera del Manzanares. La triangulación iniciada por el propio Rondón, con apertura a la derecha a Sebastián Fernández, fue continuada por el joven delantero con un desmarque al primer palo que hizo dudar a la defensa y permitió que el uruguayo centrara al segundo, donde aparecía el brasileño con toda su potencia.
Por suerte no es su único argumento y en este tramo, desde que Pellegrini le trasladó las enseñanzas de Raúl en la previa del partido ante la Real Sociedad y hasta el Vicente Calderón, ha logrado tres goles más. Los dos del equipo ante el Espanyol y uno de los tres ante el Hércules. Todos de diversa factura, lo que habla de su amplio repertorio, más aún cuando en él ya ha incluido las enseñanzas del siete.
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