Economía

Volkswagen reducirá sus inversiones en 2016 por el escándalo de las emisiones

  • El grupo anuncia que desembolsará 12.000 millones, 1.000 menos de los previstos. La mitad del gasto se quedará en Alemania. La compañía hará "todos los esfuerzos" por mantener el empleo.

El grupo automovilístico alemán Volkswagen reducirá hasta 12.000 millones de euros sus inversiones durante el año próximo, lo que supone una disminución del 7,6% en comparación con la estimación media de unos 13.000 millones de euros anuales previstos antes de conocerse la manipulación de gases en motores diésel y de gasolina, según informó la empresa ayer en un comunicado.

El grupo indicó que está alineando su inversión en su división de automoción a la actual situación, después de reconocer el uso de un software que alteraba las emisiones de óxido de nitrógeno (NOx) de vehículos diésel e irregularidades en las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de otros modelos de gasolina.

El presidente de la empresa, Matthias Müller, afirmó, tras la reunión del consejo de vigilancia, que Volkswagen está operando en "tiempos inciertos y volátiles". "Estamos priorizando de forma estricta todas las inversiones y gastos planeados. Como ya estaba anunciado, todo lo que no sea absolutamente necesario será cancelado o pospuesto", añadió.

El directivo explicó que la compañía aumentará hasta 100 millones de euros el gasto en tecnologías de conducción alternativa durante el año próximo y resaltó que prevén reforzar su presencia en los campos de la movilidad eléctrica y en la digitalización.

"No vamos a cometer el error de ahorrar en nuestro futuro", aseguró, al tiempo que resaltó que el eje del negocio se centrará en el rápido desarrollo de sistemas de conducción eléctricos para las marcas Volkswagen Turismos, Audi y Porsche.

La corporación destacó que la mayor parte de sus inversiones se destinarán a nuevos productos, a continuar con la estrategia de las plataformas modulares y a completar el aumento de la capacidad productiva. Por ejemplo, al Golf de la próxima generación, el Audi Q5, la nueva fábrica en Polonia, así como adelantos para la electrización de las plataformas modulares. Cerca del 50% de las inversiones se concentrarán en las 28 plantas del consorcio en Alemania.

Entre los proyectos que la compañía va a paralizar se encuentra el nuevo centro de diseño en Wolfsburg (Alemania), lo que aportará un ahorro de 100 millones de euros. También revisará la construcción de un taller de pintura en México. Igualmente, el proyecto del sucesor del Phaeton, que será eléctrico, se retrasará. Müller destacó que la compañía revisará y "potencialmente cancelará" nuevos gastos o los retrasará para los próximos años.

Sin embargo, la empresa se ha comprometido a que, junto con los representantes del comité de empresa, hará "todos los esfuerzos para mantener nuestra plantilla clave a bordo", explicó Müller.

Las joint ventures que mantiene la empresa en China no estarán envueltas en esta revisión de las inversiones, por lo que se mantienen los planes anteriores que contemplan inyectar 4.400 millones de euros en 2016.

Por su parte, la Comisión Europea anunció ayer que ampliará hasta finales de diciembre el plazo que había otorgado a Volkswagen para aclarar qué modelos y cuántos vehículos están afectados por la manipulación de emisiones de CO2, después de que el fabricante alemán solicitase una extensión de los diez días concedidos.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios