LA semana pasada tuvo lugar en Málaga el 30º Congreso de la Sociedad Española de Medicina Estética. La Medicina Estética abarca disciplinas que van desde el mero tratamiento de la piel del rostro por efectos puramente estéticos hasta tratamientos de cirugía donde se une la estética a la salud, cobrando ésta última incluso más importancia. Entre las muchas ponentes, quiero destacar la del doctor Basilio Moreno, Jefe Clínico de Endocrinología y Nutrición del Hospital General Gregorio Marañón y Jefe de la Unidad de Obesidad del mismo Hospital. ¿Por qué avanza la Obesidad si tanto instituciones como facultativos y población sabemos de los efectos devastadores del sobrepeso y la obesidad en nuestra salud? La respuesta es clara: no tenemos herramientas adecuadas para enfrentarnos con el monstruo del sobrepeso y no somos capaces de ver el riesgo que corremos aumentando nuestras posibilidades de mortalidad a medida que aumentan nuestros kilos en la báscula.

Los tratamientos multidisciplinares tratan en su conjunto el problema de la obesidad dotando a los pacientes de herramientas y mecanismos para afrontar y enfrentar su enfermedad.

El equipo de médicos que componen estos tratamientos son expertos en obesidad y los componen, por norma general, endoscopistas, cirujanos, anestesistas, nutricionistas, endocrinos, psicólogos, DUEs y auxiliares de clínica que acompañarán al paciente en todo su periplo hacia el éxito.

Cuando un paciente acude a un centro especializado en obesidad en busca de apoyo, lo primero es saber qué técnica es la adecuada para él atendiendo a sus características, su historia clínica, su IMC (Índice de Masa Corporal), los tratamientos anteriores que ha realizado para perder peso, sus expectativas y su nivel de compromiso con el programa; cabe destacar que sin el compromiso del paciente, nada de lo que se le plantee tendrá éxito. Las técnicas que mejores resultados han dado a lo largo del tiempo, por sus mínimas complicaciones, y por el porcentaje de peso que los pacientes pierden en el primer año, son la Colocación del Balón Intragástrico, la Técnica o Método POSE y la Gastrectomía Tubular.

El BIG ( Balón Intragástrico) se coloca por vía endoscópica con sedación y su puesta dura en torno a 20 ó 25 minutos; una vez que el globo se encuentra alojado en el estómago se llena de suero salino, ocupando así un volumen en la capacidad gástrica que va a provocar que el paciente se sienta saciado con menor cantidad de comida. A los seis meses el balón es extraído, previo vaciado, y se sigue trabajando con el paciente en consulta para reforzar y fijar todo lo aprendido con anterioridad.

El Método POSE consiste en hacer una serie de pliegues en la cavidad gástrica a nivel de Fundus y Antro (el Fundus es la parte que más distiende en el estómago y el Antro es la parte final con salida a intestino ) consiguiendo de manera permanente la reducción del 20 - 30% de la capacidad inicial, y favoreciendo así, que la sensación de saciedad por parte del paciente sea con menor cantidad de alimento ingerido y propiciando el enlentecimiento del vaciado del estómago, por lo que la sensación de apetito aparece mucho más tarde. La Gastretomía Tubular es un método quirúrgico por laparoscopia y bajo anestesia general, mínimamente invasivo que tiene una duración en quirófano de 45 a 90 minutos aproximadamente. Con esta técnica se reduce el tamaño del estómago un 70 - 80% de manera permanente, quedando un estómago con forma de tubo o manga completamente funcionante y con las mismas capacidades digestivas y absortivas que antes de la intervención. Esta técnica está indicada para pacientes con grandes problemas de obesidad que hayan intentado otros métodos supervisados con anterioridad y no hayan tenido éxito.

Ninguna de estas técnicas tendrá efecto duradero en el tiempo si no es reforzada con los seguimientos y visitas periódicas con el médico y el especialista al igual que con el nutricionista y el psicólogo.

La pregunta del millón cuando un paciente obeso se visualiza en un futuro perdiendo peso es: ¿qué ocurrirá después? Para eso, la medicina también tiene respuesta, existen numerosos tratamientos estéticos y quirúrgicos para ayudar a las personas que han perdido gran cantidad de kilos a sentirse del todo felices. Masajes, drenajes, radiofrecuencia, hilos tensores y hasta cirugía plástica son las alternativas para aquellos que después de haberle ganado la partida a la obesidad quieren reflejar por fuera cómo se sienten por dentro.