-El alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, se le ha adelantado esta vez con su carta a Griñán.

-¿A qué se refiere?

-A su lista de 16 peticiones a la Junta, entre ellas, otra vez, la del Estatuto de Capitalidad para Sevilla, con una financiación adicional.

-Mi compañero Zoido no tiene ninguna razón, ya lo he dicho varias veces. No quiero abrir otro debate, pero espero que ni este Gobierno autonómico ni los que le sigan detrás le hagan caso, porque sería una injusticia para el resto de Andalucía. Javier Arenas conoce mi criterio perfectamente. Y Zoido también. Insisto, Málaga pagaría un canon por ser capital. Tiene muchas ventajas. Y los problemas de financiación de los ayuntamientos hay que resolverlos para todos, no para uno solo.

-Si el PP gana la Junta, ¿insistirá con lo de construir al norte de la ronda este?

-El PP va a ganar la Junta, no hay condicional. Claro que vamos a insistir, si hace falta en los tribunales. La Junta se extralimitó al entrar en nuestras competencias. Y a la ciudad le viene bien utilizar ese espacio para equipamientos de calidad y más espacios forestales.

-¿Siente usted el cariño suficiente de su partido?

-Sí.

-¿Incluso tras la tibieza mostrada ante su deseo de presidir la FEMP?

-Totalmente. Lo que ocurre es que hay mucha gente válida para presidirla, y mi partido es  también el del alcalde de Valladolid, de Murcia, de Sevilla, de Castellón, de Valencia. ¿Por qué espera usted que se pronuncie a mi favor? Y para luchar por los objetivos de la FEMP, el municipalismo y la segunda descentralización pendiente, no me hace falta presidirla.  

-Cambiando de tema, los vecinos del centro estudian ponerle una demanda por los ruidos.

-En el tema de ruidos hay que ser más activos, conseguir la perfecta insonorización de los establecimientos, aunque tenemos en contra la ley antitabaco, con la dinámica de salir a la calle.

-También ha provocado cierto desmadre de los hosteleros en la ocupación de la vía pública con sus terrazas, ¿no cree?

-Ahí confluyen dos factores, la ley antitabaco y el éxito del centro. Hay una demanda clara y los bares te lo piden. Vamos a hacer un esfuerzo para que la ciudad sea cómoda, con una ocupación moderada de la vía pública y cómoda también desde el punto de vista del ruido. Me consta que estamos incrementando los controles y nadie se va a exceder del espacio permitido.

-El Ayuntamiento también ha recibido muchas críticas por el botellón en la Feria.

-Tenemos que conseguir cambios en la actitud de todos. Hay un labor educativa por un lado y también una parte punitiva. Tenemos una ordenanza acertada, equilibrada, en la que el que no tenga medios para pagar las multas puede dar servicios a la comunidad...

-Pero la ordenanza no se cumplió en Feria.

-No. Pero el problema era cómo actuar ante una masificación así. ¿Cómo podía acabar un intento de la Policía de disolver a gente que, digamos, no está en su punto de equilibrio? Comprendo que por prudencia se actuó aparentemente con permisividad, pero creo que con el acierto de buscar que no fuera peor el remedio que la enfermedad. Se podía crear un conflicto grave. Eso no quiere decir que vamos a estar cruzados de brazos. Durante el año se hará cumplir la ordenanza. Y en Feria, también.