Licenciado en Medicina por la Universidad de Buenos Aires, doctor en Neurociencias por la Universidad de Málaga, miembro del Departamento de Psiquiatría y Ciencias del Comportamiento de la John Hopkins University School de Estados Unidos y profesor asociado de Ciencias de la Salud del Departamento de Medicina de la UMA. Un simple vistazo al currículo de Marcelo L. Berthier muestra su intensa labor científica. El jueves recibió en Madrid el premio de la SEN Alzheimer por su trabajo en el campo de las afasias, una enfermedad que provoca la pérdida del lenguaje y de la comunicación por un daño cerebral adquirido, sobre todo como consecuencia de un ictus.

-Usted ha llegado a calificar a la afasia como el trastorno psicológico más devastador que existe.

-Sin ningún tipo de dudas. Indudablemente hablar es lo más importante y es lo que no distingue de otros primates. Perder esa capacidad es el trastorno psicológico más devastador que existe. La persona pasa a ser dependiente, puede perder su empleo, puede llegar a aislarse...

-Acaba por estando marginada.

-Evidentemente. La afasia margina a las personas afectadas porque además de los problemas de lenguaje y comunicación que padecen, conlleva graves problemas en la vida emocional, personal y laboral del paciente.

-¿Qué papel juega en esta enfermedad la familia?

-Es una enfermedad muy dura para los familiares y el cónyuge es el más afectado porque la relación personal que existía anteriormente se modifica. El paciente no puede expresar sus deseos o simplemente no puede seguir la conversación con la misma velocidad. Imagínese lo duro que puede llegar a ser.

-Pero la afasia sigue siendo una gran desconocida para casi todos.

-Es así, pero le doy un dato. En Andalucía se producen cada año 21.000 nuevos ictus y de ellos unos 7.300 derivan en comportamientos afásicos. Estamos hablando de una prevalencia muy alta. Ahora bien, si hacemos una encuesta ni el 10% de los encuestados le van a dar una definición exacta.

-¿Cree que se destinan los fondos necesarios para tratar esta enfermedad?

-Nunca se han destinando los fondos adecuados a pesar de que se trate de un área en la que se ha investigado mucho a nivel internacional. Sin embargo, en España hay muy pocos grupos trabajando en este campo y no goza de tanta trascendencia como otros enfermedades neurológicas como el alzeihmer o el parkinson.

-En este tipo de enfermedades, ¿qué es más importante, una buena terapia o un buen medicamento?

-Nosotros pensamos que ambos. Está claro que la terapia es el pilar fundamental, pero los avances médicos que se han producido también son muy importantes. La mejor terapia es la rehabilitación intensiva. Existe evidencias de que más horas de terapia durante un periodo de tiempo prolongado brinda mayores beneficios que las terapias breves.

-¿Tiene cura?

-La recuperación es alta y casi la mitad de los pacientes con afasias secundarias tiene buena evolución. La recuperación completa es posible en alguno de ellos.

-En el caso del alzheimer será más duro porque a esa pérdida del lenguaje se le añade el deterioro de otras funciones cognitivas.

-La enfermedad del alzheimer repercute directamente en el aspecto intelectual y cognitivo, propio de los humanos, por lo que no es de extrañar que el lenguaje esté alterado, ya que se considera un elemento fundamental dentro del proceso mental.