El tiempo apremia y el horizonte de 2015, plazo límite dado por la Unión Europea para que el saneamiento integral esté terminado, empieza a vislumbrarse cada vez más cerca. Ante el retraso que acumula la depuración en la provincia de Málaga, el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos advierte que aún hay 42 municipios que no depuran sus aguas residuales, a pesar de que desde 2011 la Junta de Andalucía cobra un canon del agua a través de las empresas de abastecimiento municipales para poder ejecutar este tipo de infraestructuras.

Casi 28,5 millones de euros es lo que este gremio calcula que la Administración autonómica ha obtenido en la provincia mediante el cobro de este canon, que se estableció en la Ley de Aguas de Andalucía 9/2010 de 30 de julio con carácter finalista para financiar un programa de 47 obras de infraestructuras de depuración y saneamiento declaradas de interés en Málaga con un coste de 393 millones de euros.

Pero, según el informe sobre la situación de la depuración de las aguas residuales realizado por la comisión de estudio de la Demarcación de Andalucía, Ceuta y Melilla de este colegio profesional y dado a conocer ayer, ninguna de las obras proyectadas para cumplir en 2015 con el vertido cero ha comenzado, mientras que únicamente se han licitado y adjudicado cinco.

La vicedecana del Colegio de Ingenieros explicó ayer que el objetivo del informe es "demostrar que, a diferencia de lo que argumenta la Administración, las obras públicas son necesarias y dinero para hacerlas hay". De hecho, la Junta de Andalucía prevé recaudar 86,2 millones hasta 2015 en la provincia (16,9 millones este año; 19,2 millones en 2014 y otros 21,6 en el siguiente) gracias al cobro de este canon que fue aprobado no sin polémica.

Dado que apenas queda un año y medio para cumplir el último plazo dado por la UE, la responsable del colectivo advirtió que las obras "no pueden reprogramarse más si se quiere llegar a tiempo". Para justificar su reivindicación señaló que, además de los 42 municipios malagueños que aún siguen sin depuración en ninguno de sus núcleos de población, hay otras 41 plantas depuradoras -de las 54 en total construidas en la provincia- presentan alguna deficiencia, es decir, funcionan mal o simplemente no funcionan. Según el informe, siete de las cuales están abandonadas y fuera de servicio por los graves daños que sufrieron en las inundaciones del año pasado, como es el caso de Almáchar, Almogía, Cañete la Real, Cuevas Bajas, Riogordo, Valle de Abdalajís y Villanueva del Trabuco .

La radiografía que el colectivo ha hecho del mapa de la depuración en la provincia revela también que la planta de Villanueva del Rosario carece de colector de llegada y no depura, otras cinco se encuentran obsoletas con dimensiones insuficientes para la población que atienden, once tienen muy mal o mal funcionamiento, otras cinco presentan carencias o problemas de diversa índole, y una docena precisan mejoras en sus sistemas.

A parte del ya conocido retraso que acumula el proyecto de la depuradora de Nerja, los casos más flagrantes por la falta de depuración a día de hoy son, según el informe del colectivo, son el Alhaurín el Grande, Coín y Cártama que siguen vertiendo sus aguas sin depurar y la de sus núcleos a los cauces del río Guadalhorce y de su afluente, el río Fahala.

A ellos hay que sumar una larga lista de otros municipios más pequeños que siguen sin depuradora y vierten a sus ecosistemas cercanos de especial interés ecológico, como el Valle del Genal y el Valle del Guadalhorce, así como los parques naturales de la Sierra de las Nieves, de la Serranía de Ronda y de Los Montes de Málaga.

Los ingenieros aseguran que, pese a que la Costa sí cuenta con depuradoras, la capacidad de estas en época estival, cuando la población estacional triplica a la censada, no es suficiente y que "perduran pequeños vertidos irregulares de innumerables urbanizaciones diseminadas que no están conectadas a la red general".