La Subdelegación del Gobierno ha acordado multar con 4.000 euros a una joven malagueña de 21 años por organizar la Fiesta de la Primavera que se celebró el pasado 12 de abril entre las 15:00 y las 00:00 en los alrededores del auditorio municipal de la capital. La resolución, a la que ha tenido acceso este periódico, señala que "la reunión multitudinaria no fue comunicada en tiempo y forma a la autoridad gubernativa, a pesar de que la convocante fue citada en las dependencias de la Policía Local e informada de los requisitos legales de la convocatoria, así como de las consecuencias de la celebración sin cumplirlos".

La joven, que ha sido identificada como M. J., C., aseguró a este periódico que nunca había asistido a este tipo de fiestas, por lo que se le ocurrió la idea de crear un evento a través de Facebook. Solo unos días después de hacerlo, dos agentes de la Policía Local se personaron en su domicilio para advertirle de la ilegalidad del macrobotellón que pretendía celebrar y de que debería asumir los gastos ocasionados si finalmente se llevaba a cabo. Fue en ese momento cuando, según cuenta, se apresuró en cancelar el evento, pero había, afirma, "más gente dándole difusión".

Aunque inicialmente la fiesta, prevista para el 5 de abril, se desconvocó por amenaza de lluvia, en apenas unas horas ya se había establecido una nueva fecha, con la que la joven, defiende, no tuvo nada que ver. "Cuando me enteré de que esto me supondría una multa rectifiqué. Siguió difundiéndose y no pude evitarlo", aseguró ayer, poco después de que se le comunicara la multa.

De hecho, según pudo comprobar este periódico el día en que tuvo lugar el evento, a primera hora de la tarde, Manuela, la madre de la denunciada, trató de disuadir a los primeros grupos que se aproximaban a los aledaños del auditorio municipal para evitar aglomeraciones. "Fui hasta allí para avisar a todas las criaturas de que no lo hicieran porque mi hija podría pagar los platos rotos. Le dije a la gente que si participaba tendrían que pagar una multa muy elevada, pero aquello fue una invasión de botellas y ni siquiera la Policía pudo controlarlo", indica la mujer, que asegura que los agentes trataron de "tranquilizarla" al decirle que "no le pasaría nada".

En la notificación se expone que para la determinación de la cuantía de la sanción propuesta se ha tenido en cuenta "el principio de proporcionalidad, especialmente la gravedad de los hechos por la duración y la cantidad de personas afectadas". Así, para poder garantizar la seguridad del evento se movilizó a 88 agentes de la Policía Local, uno de los cuales, añade el escrito, resultó lesionado al ser agredido con una botella por un participante.

No fue el único incidente registrado aquel viernes en el macrobotellón con el que, tradicionalmente, los estudiantes dan la bienvenida a la primavera. El más grave ocurrió hacia la media noche, cuando uno de los casi 5.000 jóvenes que acudieron a la concentración perdió la vida al sufrir un atropello en la carretera A-357. La víctima, de 22 años y que murió en el acto, fue alcanzada por un vehículo al tratar de cruzar por una zona no habilitada para peatones.

Durante esa jornada, en que la Policía llegó a decomisar 1.100 litros de alcohol, se produjeron también cuatro reyertas. En el listado de intervenciones, destacó además la detención de tres personas por atentado contra un agente de la autoridad, por robo con intimidación y por un delito contra la Seguridad Vial. Además, un total de 42 personas fueron denunciadas por practicar botellón; 15 por consumo de estupefacientes; tres por ruido inadmisible, y una por ejercer la venta ambulante sin autorización. Asimismo, se echó el cierre a uno de los negocios chinos próximos a la zona por vender alcohol a menores de edad.

Colaboración

La joven que ha sido denunciada por la Policía Local como organizadora de la Fiesta de la Primavera ha pedido colaboración para reunir los 4.000 euros de la multa a la que tiene que enfrentarse. "Mi madre es soltera y vivimos con 450 euros de pensión. No tenemos trabajo y la sanción nos va a arruinar. Me ofrezco también a realizar trabajos sociales", manifiesta M. J, C., que se plantea impulsar una colecta para que cada persona aporte un euro y así conseguir el dinero que necesita. En caso de que no sea posible, espera que, al menos, se le permita asumir el pago de la multa en varios plazos. "Es muy injusto. Mi hija lo hizo por ignorancia, inconscientemente, pero ya ha aprendido la lección. Fue un error cometido a través de las redes sociales, pero creo que pagar 4.000 euros es excesivo. Somos una familia humilde y sentimos mucha impotencia", agrega la madre de la joven, que pide "un poco de consideración".

Según su testimonio, su hija "nunca se había visto envuelta en ningún lío", por lo que los "nervios la traicionaron" y cuando prestó declaración a la Policía negó haber sido la autora del evento, que durante varios días circuló por las redes sociales. "Nos asustamos. La culpa recae siempre sobre los más inocentes. La gente mata y sale a los tres días de la cárcel. No pensábamos que esta historia llegaría tan lejos", añade.