Málaga

El Gobierno reconoce que la nueva pista del aeropuerto costó 120 millones más

  • En una respuesta parlamentaria, indica que la obra, adjudicada en 244 millones, acabó suponiendo una inversión de 363 millones de euros por "diversos modificados y revisiones de precio".

Los desajustes en las grandes obras ejecutadas en tiempos de bonanza económica vuelven a quedar en evidencia. El último caso en estar bajo el foco es la construcción de la segunda pista del aeropuerto de la capital de la Costa del Sol, infraestructura clave en el proceso de transformación del aeródromo malagueño pero que, según los datos confirmados por el Gobierno central, acabó costando del orden de 120 millones de euros más que lo inicialmente previsto. En una respuesta parlamentaria, publicada el pasado 19 de septiembre, se precisa que la inversión final realizada en el nuevo campo de vuelo ascendió a 363,4 millones de euros, a pesar de que fue adjudicada en junio de 2007 por 244,1 millones.

La variación entre las dos cifras manejadas se justifica, señalan los responsables de la Administración central, en la contestación, a "varios modificados, revisiones de precio y la liquidación", sin especificar en el documento a qué se corresponde cada uno de los conceptos. Lo que sí se especifica es que si bien la obra está finalizada y en disposición de ser utilizada desde hace un año, se reserva en el presente Presupuesto General del Estado 5,1 millones de euros para el abono de retenciones y reclamaciones previstas.

Los números vinculados a la segunda pista ganan en envergadura si se tiene en cuenta la nula utilización que desde que se puso en servicio a mediados del año pasado ha tenido. La caída brutal de los vuelos en el aeropuerto costasoleño, consecuencia evidente de la crisis económico, concluye la innecesariedad de mantener abierta este segundo campo de vuelo, dado que con la pista antigua es suficiente para el servicio ordinario.

Muestra de esta realidad es que los propios responsables del aeropuerto admiten que a la espera de que mejore el tráfico aéreo, la nueva infraestructura sólo será abierta los fines de semana, principalmente, de los meses de verano, coincidiendo con las fechas de mayor llegada de turistas a la Costa del Sol. El resto del año, permanecerá cerrada. "Sólo se abriría a demanda, en función del tráfico de aviones", señalaron las fuentes. Según los datos del Ministerio de Fomento, los diferentes elementos a tener en cuenta en esta parte del proyecto costaron 470 millones de euros, a los que añadir otros 168 millones en concepto de expropiaciones.

La senda recorrida por la segunda pista del aeropuerto no es exclusividad suya. Un simple repaso a las grandes infraestructuras llevadas a cabo en la provincia de Málaga en las última década permite constatar la disparidad entre los valores por los que fueron adjudicados estos proyectos y los que finalmente se han abonado y reconocido. En algunos casos, como ocurrió con la hiperronda, de forma justificada, dado que el aumento realizado en el presupuesto se produjo a tras la introducción de evidentes mejoras en el trazado de la autovía.

Esta variación, consistente en la ampliación a tres carriles de buena parte de su recorrido, supuso que la inversión de la segunda ronda de circunvalación prácticamente se duplicase, pasando a unos 522 millones de euros. La secuencia ocurrida con esta vía, en funcionamiento al completo desde finales de 2011, es semejante a lo ocurrido con el Metro, cuya inversión supera hoy los 550 millones de euros, a la espera de determinar el modo de acometer la parte final de su recorrido.

En el caso del suburbano, la Administración responsable de la obra, la Junta de Andalucía, no habla de sobrecoste en la obra, dado que la misma nació de un anteproyecto al que se realizaron multitud de variaciones técnicas, lo que repercutió de forma clara sobre el valor de los trabajos. A pesar de estas razones, la realidad es que esta infraestructura fue adjudicada por unos 357 millones de euros (con el material móvil el presupuesto era de 403 millones), cifra muy lejana de los ya mencionados 550 millones y de los alrededor de 900 en los que se estima pueda costar la obra si se el tramo final, que habrá de discurrir por el centro de la ciudad, se ejecuta bajo tierra.

En materia ferroviaria otro ejemplo a tener en consideración en este particular listado de desajustes económicos es el del soterramiento de las vías del tren a su acceso a la ciudad. El mismo fue contratado a la empresa Sacyr por 144 millones de euros, cifra que ha ido creciendo año a año hasta superar los 210 millones.

Dentro de este análisis, se constata que todas las obras impulsadas en la etapa de Magdalena Álvarez al frente del Ministerio de Fomento, que incluyeron la transformación de los principales nudos viarios de la capital de la Costa del Sol, vieron crecer significativamente sus costes de adjudicación: el soterramiento de San Pedro Alcántara, adjudicado por 49,9 millones, costó casi 86 millones; la segunda fase de acceso al puerto, contratada a Sacyr por 20,5 millones, según la información de Fomento, alcanzó finalmente los 29 millones.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios