La Demarcación de Costas de Málaga no quiere correr riesgos y, en previsión de que hasta abril existe un elevado riesgo de que haya nuevos temporal costeros, este año se retrasará el grueso de las actuaciones de regeneración de las playas hasta después de la Semana Santa.

La mayoría de los municipios costeros así lo han pedido, según aseguró a este periódico el responsable del organismo dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, Ángel González, porque "es previsible que entre marzo y abril haya fuertes temporales que se lleven la arena si se echa demasiado pronto".

No es la habitual forma de actuar de Costas y menos teniendo en cuenta que la Semana Santa este año es tardía y podría ir acompañada de buen tiempo para hacer uso de las playas. Pero la experiencia de otros años, según González, "ha demostrado que verter la arena en las playas antes de esa fecha resulta en ocasiones poco eficaz si luego viene un temporal".

Así, por tanto, el arreglo de la mayoría de las playas se hará a partir de finales de abril o principios de mayo y esta misma semana el departamento malagueño enviará a la Dirección General de Costas la planificación diseñada para que dé el visto bueno. Pero sí habrá una serie de playas donde se tiene intención de actuar antes de la Semana Santa a petición de los ayuntamientos debido a su mal estado.

Es el caso de la playa de El Palo de Málaga capital donde el organismo dependiente del Ministerio de Medio Ambiente tiene previsto intervenir a corto plazo porque la arena de la zona de baño ha llegado ya prácticamente hasta el borde del paseo marítimo como consecuencia de los últimos temporales costeros. Costas va a realizar un reperfilado de las zonas de baño para delimitarlas y evitar que la cota siga subiendo hasta el paseo. González explicó que la arena resultante se aprovechará para regenerar la propia playa de El Palo o de Las Acacias.

El calendario de trabajos de Costas también incluye a corto plazo el arreglo de varias playas de Marbella y Fuengirola también dañadas durante el invierno. Y, como suele ser habitual cada año, próximamente se intervendrá en la playa de Ferrara en Torrox, una de los más frágiles frente a los temporales de viento de levante.

Pero en esta ocasión será distinto y Costas pretende probar a verter los áridos directamente en el mar para que de esta forma sea el mar el que se encargue de filtrar de manera natural el limo que la arena procedente de la desembocadura de los ríos.

Según el responsable de Costas, la próxima semana está previsto que comience el acopio de arena en los ríos Vélez y Benamargosa y que en un par de semana se ponga en práctica el nuevo método de regeneración.