La crispación el sector del taxi de Málaga por la situación que se vive en la parada del aeropuerto de la capital va en aumento. Tanto es así que el presidente de la Asociación de Autónomos del Taxi (Aumat), José Antonio Mate, habla claramente de las posibles consecuencias que provocaría una respuesta contraria de la Junta de Andalucía a las exigencias de los profesionales, que cumplieron ayer su quinto día de paro en el aeródromo. "El viernes vamos a la reunión y esperamos cerrar esto ya porque si no la reacción del sector podría ser imprevisible", afirmó Mate, quien confió en que la Consejería de Fomento acabe cumpliendo lo que se comprometió a hacer a mediados del año pasado.

"Si a la Junta se le ocurre salirse del guión habrá engañado a los taxistas de Málaga y les habrá pisoteado la dignidad", insistió el representante de Aumat. La jornada de ayer, según Mate, estuvo marcada por la normalidad de los últimos días, es decir, con el aeropuerto sin servicio alguno de este medio de transporte público. A excepción, admitió, de algunos servicios que se prestaron para personas con algún tipo de discapacidad.

El servicio, como comentó, está suspendido al menos hasta el viernes, jornada en la que el sector ha sido llamado a un encuentro en Sevilla por los responsables de la Dirección General de Transportes de la Junta. En ese encuentro, la Junta quiere exponer a los taxistas de la capital las conclusiones de un estudio que viene realizando desde hace meses y con las que pretende confirmar o desmentir el supuesto trato desigual que denuncian estos profesionales y amparado por el decreto 11/85.

De acuerdo con esta norma, que regula el taxi en la comunidad, es factible que taxis de fuera de la ciudad, previa contratación, acudan al aeropuerto a llevar o recoger pasajeros. Frente a esta realidad, Aumat demanda un cambio en el decreto regional para que se permita la "reciprocidad modulada". "Es modulada porque los taxis de otros municipios pueden decidir si vienen o no al aeropuerto; por ejemplo, si los vehículos de Estepona deciden no venir, nosotros no tendríamos la posibilidad de acudir a su localidad a recoger o dejar pasajeros; pero si deciden hacerlo se nos tiene que dar la posibilidad a poder ir nosotros también a sus municipios", expuso.

Mate, que reiteró sus disculpas a los ciudadanos afectados por el paro y enfatizó que no hay nada en contra de los compañeros del resto de la provincia, se encontró ayer con la crítica contundente del consejero de Turismo, Rafael Rodríguez. Lejos de la tibieza de las valoraciones de los últimos días, Rodríguez mostró su rechazo a lo que denominó "huelga salvaje" de los taxistas en el aeropuerto, si bien aludió a la voluntad de acuerdo por parte de la Junta.

"Cualquier actuación como la que están practicando los taxistas de Málaga tiene un efecto negativo en el sector turístico; se trata de una huelga salvaje que no cubrió ninguno de los pasos necesarios y que están establecidos en el ordenamiento vigente para que los trabajadores puedan ejercitar su derecho a la huelga", manifestó.