La asistencia ginecológica y obstétrica en el Materno "pasa por sus peores momentos desde que hace más de 30 se inauguró el hospital". Es la visión de ginecólogos del centro sanitario que denuncian que las plantas que quedan abiertas están a "más del 100%" de ocupación. "Lo que hace años fue un hospital con siete plantas dedicadas al tratamiento de los problemas de salud de las mujeres ha quedado limitado a menos de tres", se quejan.

Según los profesionales, las pacientes operadas de mama, de patología ginecológica, de oncología, así como las que acuden porque están iniciando el trabajo de parto solo disponen de 32 camas. Esta falta de sitio, aseguran, obliga a mantener a enfermas que requieren ingreso en el área de Observación "en condiciones impropias de un país civilizado" y en unas condiciones de hacinamiento que entrañan un riesgo de infección nosocomial.

La falta de camas no es la única queja. También reiteran la protesta que hicieron hace un mes sobre la antigüedad de los ecógrafos. De hecho, insisten en que debido a su falta de definición, no cumplirán el informe modelo que se sigue en el Plan Andaluz de Cribado de Malformaciones Congénitas, sino que ese documento se adaptará a los medios tecnológicos con los que cuentan.

"El informe será menos detallado" porque esgrimen que "no es posible asumir los diagnósticos que una unidad de diagnóstico prenatal de referencia precisa". Además, lamentan que "cualquier hospital comarcal" cuente con equipos más modernos que el Materno que es el más importante de la provincia. Según repiten, algunos de los ecógrafos están ya "descatalogados". La Administración sanitaria insistió ayer en que ya ha iniciado los trámites para su sustitución y que ha informado a los facultativos de la unidad.

Los profesionales responsabilizan a la dirección médica y a la gerencia del complejo hospitalario de la situación. Incluso, señalan que la consejera, María José Sánchez Rubio, también conoce el problema.

El malestar de los ginecólogos no es nuevo. Lleva más de un año. Pero se reavivó hace un mes, cuando medio centenar de profesionales -la casi totalidad de los médicos de la especialidad del Materno- remitieron un escrito a la gerente del complejo, Carmen Cortes, en el que le denunciaban, además, que la falta de personal y los contratos al 75% de la jornada empezaban a desbordar las listas de espera.