En plena naturaleza, rodeados por un bosque centenario de encinas y con un poblado prehistórico del neolítico como zona de actuación y estudio. En este marco participan 23 jóvenes en un campo de trabajo de verano que se organiza por parte de la Junta de Andalucía y que se desarrolla en el centro Algaba, un espacio situado a pocos kilómetros de Ronda en el que se mantiene un programa de estudios mediante arqueología experimental.

Los jóvenes, que permanecerán en este recinto durante 15 días, están realizando diferentes trabajos para poder comprobar el comportamiento que están teniendo los materiales con los que se construyó el poblado, compuesto por una veintena de cabañas con distintos tipos constructivos y rodeado por una muralla de piedra construida con barro.

Recomponer las cabañas, comprobar cómo se encuentran los diferentes materiales y machacar arcilla, además de algunas labores de limpieza, son algunos de los trabajos que están acometiendo durante estos días, lo que también les está sirviendo para tener un amplio conocimiento de esta etapa de la historia en la zona. También tendrán la oportunidad de colaborar en el conocimiento del comportamiento de los cereales, que permitirá conocer su aportación como nutrientes para el suelo.

Los jóvenes, venidos de diferentes comunidades autónomas, cuentan con un programa paralelo para completar la jornada, ya que no tienen permitida la salida de las instalaciones durante el tiempo de duración del campo de trabajo que, en el caso de Andalucía, es gratis para los originarios de la comunidad. Un hecho que destacó ayer el director del Instituto Andaluz de la Juventud, Raúl Perales, durante la visita realizada ayer para conocer el trabajo y las inquietudes de los jóvenes que participan en el mismo.