Málaga

La batalla de Álora

  • PP y PSOE padecen graves problemas internos en la localidad El candidato de 2011 de los populares ya ha caído y el aparato del PSOE hizo un intento contra su propio alcalde

EL presidente del PP de Málaga, Elías Bendodo, sólo ha desvelado hasta el momento un municipio en el que seguro no irá el candidato que figuró en las pasada elecciones municipales: Álora.

En 2011 se presentó David Gutiérrez, hasta hace unos días presidente local de la formación política en la localidad del Guadalhorce. Se supone que renunció y rápidamente nombraron a una gestora. Bendodo protegió a Gutiérrez tras la derrota, lo nombró asesor técnico de Presidencia de Diputación con un sueldo de 40.000 euros. Pero en 2012 lo designó director técnico de Educación y Juventud.

El cambio no debió satisfacer mucho al interesado que acabó dando un portazo para llevarse sus bártulos lejos del organismo provincial. Y ya con la libertad de sueldo, en noviembre de 2013 arremetía contra el propio Bendodo en la red social Facebook para expresar su desacuerdo con "algunas de la políticas que el PP está llevando a cabo en la provincia de Málaga".

Así que el desenlace era de esperar. A finales del pasado mes, Bendodo dejaba caer, como si fuera un efecto de las pasadas elecciones europeas y los cambios a implementar, que el partido sustituiría a algunos de los candidatos de municipios que perdieron las elecciones locales de 2011. Pero sólo mencionó uno. Álora.

En el PSOE el alcalde es José María Sánchez Moreno, Epi. Quien no cuenta con el respaldo de la dirección provincial del partido. José Aguilar fue el teniente de alcalde y encargado del área económica. Pero en 2012 decidió plantarle cara a Epi en la lucha por la secretaría local del PSOE y perdió: un 62% de votos para el regidor y un 38% para el concejal. Acabó de concejal de Cementerio.

La dirección del PSOE rescataba al perdedor para sustituir al frente de la agencia IDEA en Málaga a José Luis Marcos, que no encajó bien su relevo tras seis años y que le obligaba a volver después de casi tres lustros en cargos públicos a su puesto de enfermero a un centro de salud. Algún sindicato de funcionarios ha estudiado la posibilidad de iniciar acciones legales con la designación de Aguilar, porque es una persona ajena a la administración autonómica. Claro que a la vez también se filtró, aseguran que fue el PSOE, que Marcos había pedido una indemnización de 39.000 euros al considerar que había sufrido un despido improcedente. Y lógicamente Marcos no estaba en IDEA por su preparación técnica sino por decisión política lo mismo que el actual.

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