Málaga

La receta para el futuro es emprender

  • Cinco ganadores del Spin-Off de la UMA comparten sus ideas empresariales Sin ídolos, ninguno se pone techo y señala a Málaga como un gran sitio para crecer

Trabajan de lo que les gusta, tienen un millón de ideas y mucho futuro por delante. Son los cinco son ganadores del premio Spin-Off que otorga la Universidad de Málaga cada año a los mejores proyectos. Sin embargo, no todos se conocen entre sí. En cuanto llegan, estrechan sus manos y se sientan en torno a la mesa para intercambiar impresiones y experiencias. La jerga técnica no tarda en aparecer y no podría ser para menos. Miguel Ángel, Juan Francisco, Jamal y Alexis son ingenieros, mientras que Gonzalo está a punto de terminar Derecho. Hay futuro, claro que lo hay, y España es un buen sitio para crecer, afirman. Solo hay que tener una idea útil y luchar por ella.

Gonzalo Almirón y Miguel Ángel Pedraza son los ganadores del Spin-Off de este año. Socios en su proyecto Set Solutions, proponen un sistema de seguridad novedoso y eficaz para evitar el robo de cobre. Aunque son los más jóvenes del grupo, su proyecto ya ha dado varios pasos de gigante y en dos meses contará con su primer becario. "Nosotros vamos a incorporar a ocho becarios gracias a las subvenciones y ayudas que hemos conseguido. Eso era algo imposible de imaginar hace un año", confiesa Juan Francisco Cáliz, ganador en 2013 del premio a emprendedores de la Universidad. Su proyecto se llama Dolphin y se trata de un sistema para el hogar que ahorraría hasta 800 litros de agua al mes por persona. Juan Francisco lleva un año instalado en el Parque Tecnológico con su empresa Métrica 6, por lo que actúa como voz de la experiencia ante sus interlocutores, que lo escuchan con suma atención e interés.

"El problema principal cuando empiezas con una empresa es que se tiende a homogeneizar. Se invierte demasiado en producción, cuando una gran parte del dinero debe estar orientada a la promoción de tu proyecto", avisa este ingeniero mecánico de 29 años. En este mismo sentido, Almirón concuerda con una opinión firme: "Los proyectos de los jóvenes emprendedores no fracasan porque sean malos. Fracasan porque no saben venderlos a sus clientes".

No obstante, si algo han sabido hacer estos cinco jóvenes es elegir una idea de las decenas que tienen en la mente y plasmarlas para convencer al jurado del premio Spin-off, formado por representantes del ámbito emprendedor malagueño. Todos coinciden en que el primer proyecto debe caracterizarse por ser "viable y útil". Así, Jamal Toutouh, con Clever Recycling, un programa informático que establece un calendario de recogida de residuos reciclables y de rutas eficientes y Alexis Martínez, que con Virtual Box permite al telespectador interactuar con el televisor a través de un brazalete, completan un grupo que afronta con todas las ganas del mundo la responsabilidad que exige montar una empresa, aunque eso sí, con una idea clara: el objetivo principal no es hacerse ricos. "Yo tenía un sueldo fijo como ingeniero, pero quiero ser inventor así que me creé mi propio trabajo", afirma Cáliz de Métrica 6.

Esta actitud activa y emprendedora que casi roza el atrevimiento es una rara avis en España. "A los españoles nos cuesta mucho creer en nuestros propios proyectos y venderlos. Es una cuestión de cultura", sostiene Jamal. Todos coinciden en señalar a Estados Unidos como un referente a la hora de crear una empresa propia y luchar por ella, aunque los ingenieros de España son "mejores"... "La Universidad te forma para ser un gran profesional en lo tuyo, pero a la hora de impulsar tu idea y salir al mercado sientes que te faltan conocimientos", se queja Alexis.

Subvenciones, apoyo y asesoramiento gratuito... Cualquier ayuda es bienvenida, aunque lo es más si se trata de dinero y un año de estancia en el Parque Tecnológico. "Ganar el premio Spin-Off ayuda a que la gente no te vea como un loco que solo vende humo". Sin duda, esta generación no está loca. Al contrario, tienen los pies en el suelo y solo miran hacia arriba para crecer. Sin ídolos. "Hoy en día es difícil tener referentes. Sabemos que todo el mundo es capaz de todo". Así, sin mitificar a nadie, estos cinco emprendedores se vuelven a estrechar las manos y se marchan con una única meta clara: "Queremos crecer sin ponernos techo".

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