La Televisión Digital Terrestre (TDT) también se adapta a las nuevas eras. La tecnología 4G de transferencia de datos e internet ultrarrápida para móviles obligará a modificar las instalaciones de recepción de emisiones televisivas en la mayoría de los hogares antes del 1 de enero de 2015, es decir, dentro de tres meses. Desde la Asociación Andaluza de Empresas Instaladoras de Telecomunicaciones (Faitel) explicaron que este proceso, llamado dividendo digital, consiste en comprimir la banda de frecuencias en la que sintonizamos los canales de televisión y lo que queda se utiliza para distribuir la señal de 4G, que también será emitida a través de los repetidores de televisión. Este cambio estuvo motivado por la decisión de la Comisión Europea de reservar el uso de la banda que va de los 790 a los 862 megahercios (MHz), que permite a la señal 4G, entre otras cosas, penetrar de forma más fácil las paredes de las edificaciones.

El problema se produce, según explicó la asociación, cuando la instalación de televisión recibe esa nueva señal que no entiende, lo que puede provocar interferencias en determinados canales de televisión, que con la TDT no significa otra cosa que ver el canal en negro.

Pero los instaladores también se quejaron de que todavía no existe un plan de frecuencias definitivo que les permita comenzar con las adaptaciones ya, sino sólo un borrador propuesto por el Ministerio de Industria, que tiene que ser aprobado todavía por el Consejo de Ministros y publicado en el BOE para que sea oficial. Por esto los técnicos se quejan de que no van a contar con tiempo material para realizar todas las operaciones necesarias. Así, destacaron que según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la provincia de Málaga cuenta con un total de 306.384 edificios, siendo 40.253 los que disponen de instalaciones comunitarias, y 266.131 individuales. Y la capital tiene 47.421 edificaciones en total, 12.404 colectivas y 35.017 unifamiliares. Además, esta asociación también quiso aclarar que no se deberán cambiar ni los descodificadores ni los televisores con TDT, sino partes de las instalaciones, sobre todo, los moduladores de las antenas. Y destacó también que no saben cómo el Ministerio del Interior ha calculado el coste por hogar de estos cambios entre 20 y 25 euros si todavía no se conocen las frecuencias definitivas y cuando son las empresas las encargadas de fijar los precios.

Sobre la misma cuestión también se lamentaron los administradores de fincas. El Colegio de Administradores de Fincas de Málaga y Melilla (CAF Málaga) estima en unos ocho millones de euros el gasto que tendrán que desembolsar los malagueños en las adaptaciones de sus instalaciones. De esta forma, el presidente del colegio, Fernando Pastor, denunció que esto sucede porque la transición de la televisión analógica a la digital "se hizo demasiado pronto en España, por lo que no se pudo prever las frecuencias de 4G"; y resaltó que, en principio, el Gobierno se comprometió en 2009 con las compañías de televisión a que sería el Estado quien pagaría la reantenización, pero que finalmente serán los ciudadanos quienes soportarán este gasto.