Málaga

Málaga vuelve a exigir que el Metro y el Cercanías lleguen hasta La Marina

  • Todos los grupos acuerdan remitir esta demanda a la Junta y al Gobierno central, con el fin de que fijen las inversiones necesarias

El debate sobre la llegada del Metro y el Cercanías hasta la Plaza de la Marina vuelve a quedar abierto. El Ayuntamiento de Málaga, por unanimidad de todas las formaciones representadas en la Corporación, demandaron ayer tanto al Gobierno central como a la Junta de Andalucía la reserva de las inversiones necesarias para acometer ambas intervenciones. La determinación supone ir más allá de lo que materialmente se contempla en la actualidad, que es alcanzar como punto intermedio el cruce de la Alameda Principal con la calle Torregorda.

De este modo queda fijado en el proyecto de construcción del suburbano hasta el centro urbano. La intervención sobre esta parte del trazado, en fase de contratación, fija la ejecución del trazado soterrado desde el puente de Tetuán hasta la Alameda, incluyendo la adaptación del futuro túnel al paso de los trenes de Cercanías. Este añadido, por exigencia del Consistorio, debe posibilitar la prolongación del ramal de Cercanías desde la estación localizada en la calle Cuarteles aprovechando la infraestructura del suburbano. Sin embargo, el diseño apuntado por la Administración regional acota la extensión del doble túnel a apenas 295 metros de longitud. La razón esgrimida por la Consejería de Fomento para justificar esta reducción en el tajo es estrictamente económica, dada la ausencia de fondos suficientes para acometer la intervención hasta La Marina.

Fue de nuevo el equipo de gobierno del PP el que, aprovechando una moción presentada por IU a la Comisión de Urbanismo, puso sobre la mesa la necesidad de reabrir la cuestión sobre el Metro y La Marina. La iniciativa de la coalición de izquierdas incidía, de inicio, únicamente sobre las infraestructuras ferroviarias aún pendientes en la capital de la Costa del Sol y reclamaba al Gobierno central los compromisos necesarios para actuar en la llegada del Cercanías no sólo hasta La Marina sino también hasta el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA). Incluso, se abundaba en la necesidad de analizar la futura prolongación del ferrocarril hacia la zona oriental de la ciudad.

Asumidas estas exigencias por los concejales populares, el edil de Movilidad, Raúl López, reclamó a modo de enmienda extender esta reclamación a la Junta y a sus competencias en materia de Metro. Es decir, planteando la necesidad exigir la llegada del Metro hasta la mencionada plaza y hasta el PTA. Esta última propuesta supone una variación sustancial respecto al mapa previsto en el futuro inmediato del ferrocarril urbano, que excluye el acercamiento hasta la tecnópolis. Si bien en el origen del proyecto se aludió a la necesidad de estudiar su prolongación hacia el polígono empresarial, la Administración regional acabó concluyendo la incapacidad real del Metro para absorber la demanda del PTA en hora punta. Por ello, se apuntó la necesidad de apostar por el Cercanías como medio ferroviario más oportuno para responder a las necesidades de este punto.

La contrapuesta realizada por el PP sobre el Metro a La Marina contó, igualmente, con el aval del portavoz de IU, Eduardo Zorrilla, cuya formación es la misma que está al frente de la Consejería de Fomento que, hasta la fecha, pone tope al Metro hacia La Marina. No obstante, Zorrilla sí reclamó tener presente la necesidad de que, en el caso de la hipotética construcción del trazado ferroviario desde la calle Torregorda hasta La Marina sea el Gobierno central el que impulse la construcción del Cercanías, beneficiándose de manera directa el Metro por esa misma infraestructura. "El Metro debe aprovechar la infraestructura del Cercanías", comentó el portavoz de IU. Lo hizo en la misma línea en que será el Cercanías el que se aprovecha parcialmente de la infraestructura que vaya a ejecutar el Metro entre el puente de Tetuán y la calle Torregorda.

De otro lado, en la misma moción ordinaria, IU pone sobre la mesa, con el aval del resto de formaciones políticas, la necesidad de que el Gobierno impulse el soterramiento del tren del puerto, proyecto lastrado desde hace varios años por la crisis económica y la incapacidad inversora de la Administración central para acometerlo.

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