Málaga

Seis de cada diez universitarias han sufrido violencia psicológica

  • El 27% reconoce haber recibido empujones o agresiones leves y el 24% coerción sexual, según el estudio. Violencia de Género en Estudiantes de la Universidad de Málaga.

Ningún tramo de edad, ni condición social, ni nivel educativo están exentos de sufrir violencia de género. Y el estudio Violencia de género en estudiantes de la Universidad de Málaga es una prueba de ello. La profesora Remedios Fernández Amores presentó ayer las conclusiones de este trabajo que destaca que seis de cada diez universitarias han sufrido algún tipo de agresión psicológica. "Cuando examinamos ese dato, las conductas principales son los insultos, la humillación y ridiculización, el aislamiento de la pareja, sales conmigo y no con tus amigas, y el control exhaustivo", explicó ayer Fernández Amores.

Han participado 364 estudiantes en un muestreo aleatorio por ramas de conocimiento y por sexo, de manera que están representadas todas las áreas de conocimiento de la UMA. En el trabajo se destaca que un aspecto importante es el uso de las nuevas tecnologías para ejercer esta violencia de género. "Encontramos el control a través del whatsapp, de las redes sociales... dónde estás, envíame una foto para saber realmente con quién estás...", destacó la profesora Fernández Amores.

Otra de las cifras que arroja el trabajo de investigación es que casi un 24% de las chicas ha sufrido conductas abusivas en sus relaciones sexuales por parte de sus parejas. "También es verdad que es una violencia en una escala inferior, se trata de conductas de insistencia, presión y coerción sexual. El uso de la amenaza y la fuerza física para obligar a una conducta de este tipo afortunadamente no la hemos encontrado apenas en estos estudiantes", subrayó la responsable del estudio. Por otra parte, violencia física leve, empujones y tirones de pelo reconoce haber padecido un 27% de las chicas.

Fernández Amores señaló ayer que "nos ha aparecido importante y no aparecía en otros estudios nacionales, relacionar la violencia vivida con la salud percibida. Se sienten con peor salud los chicos y chicas implicados en conductas violentas aunque vemos que no son formas extremas". También concluyen en el trabajo que en el área de la salud sexual y reproductiva, "hemos encontrado también que las chicas inician sus relaciones de coito a menor edad y usan más métodos poco adecuados, como el coitus interruptus", agregó.

Pero la "desazón" de encontrar conductas sexistas y lesivas en la población universitaria, la mejor formada, la supuestamente más culta, se contrarresta con la esperanza de saber que "en los alumnos que estudian contenidos específicos sobre la violencia de género es donde hemos encontrado una disminución de las actitudes sexistas y una menor aceptación de este tipo de violencia", afirmó la responsable del estudio, que destacó "el importante papel de la prevención dentro de las universidades". Lo que también destacó Remedios Fernández Amores fue que las cifras sacadas de la UMA se encuentran en parámetros similares a los de estudios nacionales e internacionales realizados con estudiantes universitarios.

El 25 de noviembre se celebró en la Facultad de Ciencias de la Educación y Psicología con una mañana cargada de actos. "Hay que cambiar creencias, actitudes y conductas y la educación tiene un papel importante en todos los niveles, la formación puede lograr este cambio y tenemos que hacer lo posible desde la UMA", dijo Isabel Morales, directora de Secretariado de Igualdad y Bienestar Social. Y la vicerrectora Chantal Pérez destacó que se seguirá trabajando para conseguir el reto de "incorporar la igualdad como parte de nuestras vidas".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios