Silvia Montoya tiene claro que la economía no solo debe ir ligada a los números, sino que hay que apostar también por la rentabilidad social y medioambiental. Es una de las socias fundadoras de la empresa malagueña Ecoemprende y, desde 2012, preside la asociación RedVerSo.

-¿Qué es RedVerSo?

-Es una asociación multisectorial de empresas, organizaciones y profesionales que nace en 2012 con el objetivo de analizar, impulsar y visibilizar iniciativas empresariales ecoinnovadoras que promuevan una economía verde y socialmente responsable en el sur de Europa. Actualmente integran la red más de 30 empresas y este número va creciendo de manera notable. Prevemos aumentar nuestro número de socios en más del 50% antes de que acabe 2015.

-¿Y qué es la economía verde?

-El actual modelo económico no plantea soluciones a los grandes retos socioambientales a los que nos enfrentamos y enfrentaremos en la próxima década: escasez de recursos, contaminación y salud, cambio climático y crisis energética. La economía verde o la nueva economía propone un cambio de paradigma donde la economía sea un medio para garantizar nuestro bienestar y el de las generaciones futuras. Una economía socialmente inclusiva donde el aumento de los ingresos y la creación de empleos se derivan de inversiones públicas y privadas destinadas a reducir las emisiones de carbono y la contaminación, que promueve la eficiencia energética y la gestión sostenible de los recursos y que da un valor medible a la diversidad biológica.

-¿Qué peso tiene Málaga en este tipo de economía?

-En Málaga se dan las condiciones óptimas para liderar este cambio de paradigma hacia la economía verde: espíritu emprendedor, capacidad innovadora y visión internacional. Precisamente RedVerSo surgió por iniciativa de un grupo de empresas malagueñas que visualizaron la necesidad de dar forma a un sector en la provincia que cada día se hace más fuerte.

-¿Está más implantada en el resto de Europa?

-Los estudios más recientes indican que la contribución de la economía verde al total de la economía española se estima en 25.000 millones de euros anuales, un 2,4% del total del Producto Interior Bruto (PIB) a precios de mercado y esta cifra va en aumento. La legislación es clave en el proceso, y quizás sea esto lo que nos frena y distancia de los logros conseguidos en otros países de Europa como Alemania por ejemplo.

-¿Está el sector empresarial concienciado sobre la necesidad de ser más responsable desde el punto de vista medioambiental?

-Aquellas empresas con capacidad de liderazgo y mayor facilidad para gestionar la innovación serán las que continúen creciendo y generando riqueza. Ya es un hecho hoy día que quienes se comprometen con la nueva economía verde y cambian sus modelos de negocio para trabajar por un futuro más sostenible, basado en la eficiencia en el uso de la energía y de los recursos naturales, el desarrollo de la eco-innovación y la implicación de los empleados y otros grupos de interés, obtienen una ventaja competitiva estratégica que les permite ser reconocidas como líderes en su sector. Sea por filosofía o por reducción de costes, ser respetuoso tiene plusvalías económicas; gastar menos agua y energía, hacer más productos con menos recursos, diseñar productos con materiales no dañinos y que podamos reutilizar una y otra vez sin tener que tirarlos al vertedero, es principalmente inteligente.

-¿Y la sociedad en general?

-Según el Ecobarómetro de la Junta de Andalucía sí estamos concienciados y queremos ser respetuosos pero el día a día no nos permite ver más allá de los problemas cortoplacistas. Debemos recuperar la visión de futuro y convencernos de que los pequeños cambios son poderosos. Todos coincidimos en que queremos seguridad, ser felices, vivir en ciudades saludables, acceder a la cultura, evolucionar hacia sociedades más justas, prósperas y que nuestros jóvenes accedan a un mercado laboral ilusionante y digno. Es un reto de toda la sociedad, donde una vez más la clave está en la educación.

-¿Qué podría hacer una empresa para ser más verde?

-Debemos preguntarnos si nuestro beneficio sólo va a ser financiero o si también queremos beneficios ambientales y sociales. Valores como la dignidad humana, la colaboración, el impacto ambiental positivo, la justicia social, la participación democrática y la transparencia son los pilares para un crecimiento sostenible, a corto, medio y largo plazo.

-La semana que viene harán un congreso, ¿qué se va a tratar?

-Se trata de la Segunda Feria de Empresas por una Economía Verde, Solidaria y del Bien Común. Es un evento gratuito impulsado por RedVerSo con la colaboración de la Diputación de Málaga que tendrá lugar del viernes 29 al domingo 31 de mayo en La Noria. Además, la feria será marco de la asamblea anual de la Asociación Nacional de la Economía del Bien Común, un movimiento europeo interesante que comienza a calar.