Piezas metálicas que cobran vida, pequeños vehículos que se mueven solos o seres con reconocimiento de imagen y voz propia que son capaces de contestar las más diversas preguntas. La tecnología y la robótica es algo que, sin duda, atrae al público joven y llevado al terreno educativo son instrumentos que pueden dar mucho juego. Según los docentes fomentan un aprendizaje integrador que recorre desde las matemáticas a la física, la ingeniería o las artes plásticas. Buena cuenta de ello dieron ayer los estudiantes, institutos y empresas que participaron en la segunda Muestra de Robótica, Tecnología e Innovación celebrada ayer en el PTA. El evento, que busca incentivar la creatividad y el emprendimiento tecnológico entre estudiantes de ESO y Bachillerato, contó con la participación de más de 200 alumnos.

"Se trata de un punto de encuentro entre estudiantes y empresas tecnológicas del parque, las firmas muestran su trabajo y los estudiantes los proyectos que hacen en la asignatura de tecnología", explicó José Carlos Clavijo, coordinador en Málaga de la Asociación de Profesores de Tecnología de Andalucía y coorganizador de la muestra, capaz de conseguir una simbiosis motivadora para los más jóvenes e inspiradora para los veteranos. "Se trata de una forma divertida de aprender, de hacerlo construyendo, montando, programando, la robótica les gusta, les atrae porque ven su creación en movimiento y se trata de aprender por proyectos, tratan muchas cosas y ni se dan cuenta de ello", aseguró Clavijo, profesor del IES Torre del Prado. Su centro participó junto a los institutos María Victoria Atencia, Mayorazgo, Playamar, Nuestra Señora de la Victoria, Jardines de Puerta Oscura, Las Lagunas y el colegio MIT.

En cuanto a las empresas, acudieron a este evento Accentures, ATyges, DNT Framework, Grupo Premo, Funtions&Ars, Stemxion y Talkycar, que mostraron la actividad que desarrollan en el campo de la tecnología y la ingeniería. DNT, por ejemplo, mostró sus contenidos para dispositivos de realidad virtual inmersiva dedicada al sector empresarial y Talkycar explicó el dispositivo que monitoriza el vehículo para poder detectar incidencias en tiempo real.

Le empresa BQ también estuvo presente en la muestra a través de Circolab, un laboratorio de experimentación educativo-tecnológico itinerante, cuya misión principal es "implicar a las personas en el proceso de creación tecnológica desde una perspectiva libre y colaborativa", como explicó Ana Enrich. Circolab ha hecho 75 talleres en 40 ciudades, ha recorrido 8.000 kilómetros y ha intentado transmitir a 4.000 participantes un aprendizaje en el que "se integran disciplinas y se trabaja en equipo", como apuntó Enrich.

Los estudiantes realizaron exhibiciones de robótica multiplataforma, robótica autónoma con Arduino, una muestra de arquitectura bioclimática y su trabajo con impresoras en 3D, entre otras actividades.