Un total de 912 kilogramos de pescado inmaduro han sido decomisados en Mercamálaga en una operación conjunta de la Inspección Pesquera de la Junta de Andalucía y la Guardia Civil. Por un lado fueron intervenidos 565 kilogramos de chirla por incluir ejemplares inmaduros, así como 297 kilogramos de pescado inmaduro y carente de trazabilidad. De esta última cantidad, 72 kilogramos son de boquerones, 24 de merluza, 97 de chanquetes, 18 de calamares y 87 de salmonetes, y también han sido intervenidos cincuenta kilogramos de cañaíllas por mal etiquetado.

La operación supuso la incoación de un total de cuatro actas de infracción, una a mayorista y tres a transportistas. El pescado decomisado que no cumplía la normativa de trazabilidad ha sido destruido, mientras que el resto de material incautado ha sido donado al banco de alimentos Bancosol. Se trata de la segunda operación contra la pesca y comercialización de pescado ilegal en menos de una semana después de que días atrás fueran decomisados en Mercamálaga 1.028 kilos de pescado y marisco que incumplían los requisitos legales en cuanto a tallaje, documentación y trazabilidad. Las sanciones van desde los 300 a los 60.000 euros.