La Fiscalía de Málaga ha abierto diligencias de investigación por presuntas irregularidades en las obras de remodelación de la carretera Azucarera-Intelhorce, adjudicada originalmente por el Ayuntamiento de la capital a la empresa Teconsa, firma relacionada con la trama de corrupción del caso Gürtel. La actuación del Ministerio Fiscal, según informó ayer la Cadena Ser, se habría producido tras la presentación de una denuncia en la que se informó de que esta constructora, a la que el equipo de gobierno del PP rescindió el contrato por su situación de quiebra económica, podría haber inflado los trabajos de excavación y desmonte realizados en esta vía para facturar certificaciones que triplicaban el valor real de lo realizado. En concreto, se habla de unos 300.000 euros por trabajos que apenas habrían costado 80.000.

Según la denuncia remitida a la Fiscalía, las irregularidades de Teconsa serían varias. De un lado, en las certificaciones se habrían incrementado por encima de lo real los metros cúbicos de excavaciones, que habrían pasado de 5.800 a más de 67.000; de otro, se habría informado de la demolición de 41.000 metros cuadrados de pavimento demolido cuando las tareas habrían afectado sólo a 13.500 metros cuadrados, y finalmente, la constructora habría indicado que se aportaron durante las tareas 54.000 metros cúbicos de arena en lugar de 4.700.

La información que ha dado origen a las diligencias de investigación tuvo entrada en la Fiscalía el pasado 14 de octubre, dándose inicio a las diligencias penales de investigación seis días después. Junto a los hechos que se relatan figuran, por un lado, las certificaciones de obras entregadas por Teconsa al Ayuntamiento, así como las facturas de la empresa subcontratada por Teconsa y que ha realizado los trabajos, Servicios Auxiliares las Nievas.

Esta actuación judicial se suma a los polémicos episodios en los que está envuelta esta obra, financiada con cargo a los Fondos Estatales de Inversión Local (Feil), y con un presupuesto superior a los cuatro millones de euros, desde su inicio. Tras el comienzo de los trabajos, la lentitud con la que se llevaban a cabo las obras por parte de Teconsa motivó que el equipo de gobierno exigiese explicaciones a la contrata, para más tarde rescindir la adjudicación ante la imposibilidad de la firma de continuar con las actuaciones. Esta decisión dio lugar a la contratación de las acciones de remodelación a la unión temporal de empresas integrada por MLR- Ploder Uicesa, que es la que en estos momentos acomete el proyecto.