"2009 ha sido un año horrible para el empleo en la provincia de Málaga". Lo dijo ayer el secretario provincial de CCOO en la provincia, Antonio Herrera, pero lo podía haber suscrito cualquier malagueño, independientemente de que esté o no en la vida pública. El Instituto Nacional de Estadística (INE) hizo pública ayer la Encuesta de Población Activa (EPA) y, como era de esperar, los resultados en Málaga son desastrosos. Lo curioso es que es tal la acumulación de datos negativos consecutivos que este registro ya prácticamente no sorprende a nadie. Y eso que es el segundo peor dato de paro en la historia de Málaga desde el año 1976.

La EPA refleja varios aspectos a tener en cuenta. El primero es que, en el cuarto trimestre del año, la provincia contabilizaba 211.800 desempleados. Sólo en el segundo trimestre de 2009, en el que se sumaron 214.400 parados, se superó ese número. El segundo es que Málaga tiene la cuarta mayor tasa de paro de España. Sólo Las Palmas, Cádiz y Granada tienen una tasa más alta.

Decían los expertos a comienzos del año pasado que, en la actual crisis, Málaga podría terminar 2009 con 200.000 parados. Pecaron de cautos ya que desde el primer trimestre del ejercicio anterior se sobrepasó esa cifra. En el tercer trimestre hubo un momento de esperanza, pues disminuyó el número de desempleados en 40.500 personas en sólo tres meses, si bien coincidió con el verano. Ese paso adelante ha quedado ahora en el olvido pues, en el último trimestre, se volvió a recuperar el pésimo dato del resto del año.

Málaga es la segunda provincia andaluza con más parados, por detrás de Sevilla, y la sexta de España, tras Madrid, Barcelona, Valencia, Alicante y la provincia hispalense. No obstante, casi más importante que el número de parados, es la tasa de desempleo, es decir, la proporción entre el número de personas que no tienen un trabajo y la población activa. En este caso Málaga sale muy mal parada. En el cuarto trimestre esa tasa era del 27,35%, un punto por encima de la media andaluza y casi diez puntos superior a la media nacional. El récord negativo lo tiene Las Palmas con un 29,3%, por lo que Málaga no está lejos.

La tasa es muy elevada aunque, históricamente hablando, no es de las mayores que ha sufrido esta provincia. En 2009, salvo en el tercer trimestre, siempre ha estado por encima del 27%. La mayor tasa de paro en Málaga se registró en el cuarto trimestre de 1993 -un 38,82%- y, de hecho, desde el tercer trimestre de 1992 hasta el segundo trimestre de 1996 nunca se bajó del 30%. Ese periodo coincidió con una grave crisis del sector inmobiliario aunque, como señalan numerosos expertos, la actual crisis es peor que aquella porque no sólo afecta al ladrillo sino a la banca y, con ella, al resto de sectores productivos.

Ha crecido el número de parados en la provincia pero también ha vuelto a subir la población activa en 23.000 personas hasta un total de 774.200. Hay más personas que quieren trabajar, muchas de ellas amas de casa y estudiantes, y eso provoca una subida del desempleo y de la tasa de paro.

Los representantes sindicales en la provincia volvieron a lamentar ayer los datos de paro. La secretaria de Empleo y Acción Sindical de UGT Málaga, María Auxiliadora Jiménez, insistió "en la necesidad de cambiar el modelo productivo existente en la provincia para poder salir del periodo de crisis que estamos atravesando y que está azotando fuertemente a los sectores de construcción y servicios", y precisó que el aumento del paro "refleja que las medidas puestas en marcha hasta ahora para frenar el desempleo no están dando los resultados que se esperaban".

Por su parte, Antonio Herrera criticó el aumento de 16 puntos del paro durante los dos últimos años y la pérdida de cerca de 50.000 empleos en 2009. "No estamos ante una situación próxima de recuperación de empleo", subrayó, por lo que reclamó un pacto social y la puesta en marcha de una serie de medidas de "choque" para fomentar el empleo.