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Brahim y la erosión del Barcelona

  • Mañana se reúne con el Málaga Pere Guardiola, agente que aglutina poderes de azulgranas y el padre del niño. El acuerdo anda entre los 50.000 euros que ofrecen los catalanes y lo que pide el club, justo el doble.

La insistencia del Barcelona en hacerse con Brahim Abdelkader Díaz, la joya de la cantera del Málaga de 13 años, está a punto de dar sus frutos. Son más de dos años intentando, de todas las maneras posibles, convencerle de hacerse azulgrana. Y ese día puede llegar mañana, cuando está previsto que Pere Guardiola se reúna con responsables de Martiricos, seguramente el director general, Vicente Casado, para tratar de llegar a un acuerdo sobre su marcha. El hermano del exentrenador blaugrana es agente del destacamento de representación de Mediapro y al que el entorno del niño atribuyó poderes para negociar solo en nombre del club catalán, que a su vez delegó en él las negociaciones.

Se trata de un niño, de una situación muy especial con bastantes episodios a lo largo de estos últimos dos años, así que nadie descarta nada de lo que pueda pasar en dicho encuentro. Sin embargo, los últimos tratos entre las partes parecen abocarlo todo a una resolución inmediata. Las negociaciones con Casado están en marcha desde hace ya bastantes semanas. El entendimiento pasaría por un punto intermedio entre lo que estaría a dispuesto a dar el Barcelona, unos 50.000 euros, y lo que pediría el Málaga, justo el doble. Además, se especificarían múltiples pluses en favor de los blanquiazules por el rendimiento del jugador desde ahora hasta un hipotético futuro en la primera plantilla. Todas esas bonificaciones no pasarían de los tres millones de euros, según las fuentes consultadas.

El primer movimiento importante en torno a Brahim ocurrió con los dueños del club recién llegados. El propio vicepresidente, Abdullah Ghubn, no dudó en presentarse en su casa para convencerle de que su futuro pasaba por ser blanquiazul poco después de que despuntara a nivel nacional en el Torneo Alevín disputado en Estepona y el Barcelona le echara el ojo. Desde entonces, el joven talento nunca ha salido del radar catalán.

A través de un contrato particular, el Málaga efectuó un blindaje con el futbolista inaccesible para el Barcelona. Cuando todo el maremágnum institucional se precipitó el pasado verano, Guardiola logró encontrar receptividad por parte de los dirigentes de Martiricos para hablar. Eso sí, la cifra que se le puso sobre la mesa por Brahim fue prohibitiva: 600.000 euros. El Barcelona la desoyó y todo se enfrió.

El club catalán fue extendiendo sus redes sobre el chico desde muy pronto, pues invitaron en múltiples ocasiones a Brahim y a su familia a la Ciudad Condal, bien para asistir a partidos en el Camp Nou desde el palco, bien a entrenamientos. De hecho, el primero de ellos fue impactante para el crío. Sobre el césped del Camp Nou pudo tratar personalmente con Pep Guardiola o pelotear con Andrés Iniesta y el propio Leo Messi en el vestuario. De ellos recibió buenos consejos académicos y deportivos.

Los intentos de seducción incluso llevaron a que el chaval firmara un contrato con la firma Nike, que viste al Barcelona y con la que mantiene vinculaciones Guardiola. Es raro no verle con ropa deportiva de esa marca, aparte de sus inseparables botas. Incluso es tanto el material que recibe que regala botas y otras prendas a compañeros de equipo y amigos.

El pasado viernes, Brahim y su padre fueron citados en las oficinas de La Rosaleda para firmar su licencia federativa para la temporada. No obstante, asesorados por el Barcelona, se negaron a hacerlo, a pesar de la voluntad del jugador, que por encima de todo lo que quiere es no quedarse ningún fin de semana sin poder jugar al fútbol, su gran amor. Ante esta tesitura, el club catalán se lo llevaría para tramitarle cuanto antes la ficha allí y poder jugar como azulgrana de inmediato. Ello obligaría al Málaga a acudir a magistratura para denunciar la situación, tal y como hicieron en su día el Barcelona por otro malagueño, Raúl Baena, y la Real Sociedad por el lateral Zubiaurre, que se marchó al Athletic. Ambas partes están predispuestas a ahorrarle ese trámite al delantero, de ahí el encuentro de mañana.

La familia del futbolista espera noticias. Incluso tienen ya maletas preparadas para marcharse en los próximos días a Barcelona si es que se produce un desenlace inmediato. Dejarían así la vivienda en Guadalmar fletada por el Málaga, tal y como ocurre con otra de las promesas, el luso Alfredo.

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