Un estado de optimismo contenido se ha instalado en Martiricos. El Málaga de Javi Gracia está ofreciendo motivos para la ilusión tras tres victorias consecutivas conseguidas a base de goles y, especialmente en los dos últimos partidos, fútbol de altura. Los focos apuntan a los niños del ataque y Nordin Amrabat. Ellos son los principales acaparadores de los elogios por su acreditada capacidad para generar oportunidades y el tino exhibido ante la portería rival, aunque existe un otro factor fundamental que explica la buena marcha de este Málaga que bordea cifras históricas del club: se trata de un equipo compacto, bien abrochado, que regala pocas ocasiones y recibe aún menos tantos. En definitiva, un Málaga sólido.

El conjunto blanquiazul ha encajado ocho tantos en nueve jornadas, menos de uno por encuentro. Este dato, además de hablar de manera positiva de su seguridad y equilibrio como bloque, sitúa al Málaga como uno de los equipos con mejor balance en el aspecto defensivo de toda la Liga BBVA. Sólo dos conjuntos han recibido menos goles que el de Javi Gracia: el Barça, que el pasado sábado abrió su casillero de goles en contra tras recibir tres del Real Madrid, y el Atlético, de acreditada solvencia defensiva, con siete tantos encajados. Únicamente el Valencia de Nuno, una de las sorpresas del campeonato, iguala la cifra del Málaga, también con ocho dianas en contra.

Estos guarismos blanquiazules ganan realce si se comparan con las temporadas en las que el Málaga ha logrado protagonizar tan buen arranque de Liga. El conjunto de Gracia ha firmado uno de los mejores inicios históricos de la entidad en Primera. Ha igualado la puntuación de la campaña 2002/2003, con 15 puntos en nueve partidos disputados. Entonces, los de Joaquín Peiró habían sufrido 16 goles en contra. Hay que remontarse dos cursos atrás, a la campaña 2012/2013, para encontrar más puntos a favor (18) y menos goles en contra (5) una vez jugado el mismo número de partidos. Otro ejemplo que da lustre a la tendencia al alza del Málaga de Gracia es que el año en que el bloque costasoleño acabó cuarto y en Champions de la mano de Manuel Pellegrini sumaba, a estas mismas alturas de la Liga, dos puntos menos (13) y cinco goles en contra más (13 en total).

La cifra de tantos recibidos ayuda a acotar si un equipo es sólido o por el contrario su sistema defensivo padece problemas, aunque hay un indicador todavía más fiable, pues algunas veces la recepción de un gol puede ser explicada a través de la simple fortuna: el número de oportunidades y disparos en contra. En esta suerte futbolística también el Málaga de Gracia es actualmente de los mejores equipos de España. Según destaca whoscored.com, uno de los portales de estadísticas de fútbol más importantes a nivel mundial, el Málaga es el cuarto bloque de la Liga BBVA que menos remates sufre (tanto puerta como fuera). Su media es de 10,4 disparos en contra por encuentro. Únicamente es superado en esta faceta por Sevilla, con 8,8 por envite, y Atlético y Barcelona, ambos con 8,3. Cuanto menos tiros en contra, mayor garantía de éxito: nervionenses y culés lideran la tabla con 22 puntos, mientras que los colchoneros son quintos, empatados a puntos con el Valencia, con 20.

Más ejemplos del rigor defensivo del Málaga: en lo que va de curso, solamente en dos partidos de nueve jugados ha recibido más de una diana. El Valencia le hizo tres (3-0) y el Espanyol (2-2). El partido de Mestalla lleva asterisco, ya que Sergi Darder fue expulsado injustamente en el minuto 27, lo que viró de manera irremisible el dominio del choque. Javi Gracia reconocía en la previa del duelo ante el Rayo la importancia que le otorga a dejar el arco blanquiazul a cero. "Hemos dejado escapar algún punto, como ante Levante y Barcelona, pero creo que hemos sido sólidos. No hemos dado facilidades para el gol", señaló el técnico navarro en comparecencia de prensa.