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Cantera ante la necesidad

  • Javi Gracia y José Ramón Sandoval recurren a Ontiveros y Peñaranda, ambos de 18 años, en el peor momento del año para Málaga y Granada. El malaguista disputó 45 minutos a gran nivel, mientras que el venezolano fue la sensación ante el Athletic.

Que Málaga y Granada no pasan por su mejor momento deportivo queda patente únicamente mirando la clasificación. Esta situación lleva a Javi Gracia y José Ramón Sandoval a estar en la cuerda floja, por lo que cualquier derrota puede significar su sentencia. A pesar de ello, tanto al navarro como al madrileño no les ha temblado la mano a la hora de tirar de Ontiveros y Peñaranda en la pasada jornada. Los canteranos debutaban en Primera División y ambos mostraron un desparpajo inaudito para su juventud.

El marbellí Ontiveros fue partícipe de la pretemporada del Málaga. Javi Gracia lo llamó a filas ante la falta de jugadores de banda tras la marcha de los Samus. Para el extremo, aquella llamada fue un sueño cumplido y, además, le sirvió para convencer al navarro de cara a la presente temporada. Ontiveros volvió a bajar varios escalones para ser pieza clave de un Atlético Malagueño que mira por el retrovisor a todos los equipos del Grupo 9 de Tercera División. A la misma vez, ha sido un habitual en las sesiones de entrenamiento del primer equipo, hasta que ante el Espanyol le llegó su oportunidad.

Fue la gran novedad de una lista de convocados que para él fue un pasaporte a la élite. El joven jugador mostró su nerviosismo e ilusión en los instantes previos al encuentro, antes de sentarse en el banquillo para ver como su equipo se marchaba al descanso dos goles por debajo. Apenas 15 minutos más tarde, Ontiveros hacía su debut en Primera sustituyendo al anárquico Boka.

Lejos de amedrentarse, el marbellí tiró de personalidad y de hambre desde la banda izquierda. De sus botas salieron varios de los acercamientos más peligrosos del Málaga en la segunda mitad, como una combinación con Horta que acabó con un lanzamiento al poste del luso. Ontiveros no dudó a la hora de conducir la pelota, además de surtir de buenos centros a los delanteros. Además, se desfondó en defensa. No obstante, le bastaron 45 minutos para ser el malaguista que más balones recuperó (9). Tras el encuentro, Gracia felicitó al canterano indicando que "con la lógica inexperiencia de los jóvenes ha hecho las cosas bien".

Por su parte, Adalberto Peñaranda es el hombre de moda en Granada. La baja de El Arabi, unida a la ausencia de Thievy en la convocatoria, le otorgó un puesto como titular en el once de Sandoval ante los bilbaínos. El venezolano, que se convirtió en el jugador más joven en debutar en Primera con la camiseta del Granada, no defraudó a la confianza mostrada por su entrenador y disputó los 90 minutos del choque a un gran nivel.

Peñaranda, cedido por el Udinese al cuadro nazarí, había marcado tres goles en los nueve partidos disputados por el filial granadino antes de disfrutar de su debut en Primera. Sandoval apostó por un tridente ofensivo -Success, Rober Ibáñez y el propio Peñaranda- que no alcanzaba los 20 años de media. Y le salió a pedir de boca. Su Granada salió de los puestos de descenso y Peñaranda brindó a su afición un ejercicio de verticalidad, esfuerzo y, al igual que Ontiveros, ganas de comerse el mundo. Además, el venezolano puede tener continuidad este sábado en La Rosaleda, ya que El Arabi, Success y Thievy continúan sin poder entrenar.

El derbi andaluz volverá a significar un momento clave para Gracia y Sandoval. Más si cabe para el navarro, que pasa por su peor momento desde que dirige la inestable nave malaguista. En esa nube de pesimismo, Ontiveros y Peñaranda se muestran como un halo de luz para dos aficiones cansadas de un inicio de campaña desalentador. Quizá, en las botas de dos jugadores de 18 años, esté la oportunidad de Málaga y Granada de sacar la cabeza del pozo de la clasificación.

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