En pleno éxtasis futbolístico, al Málaga le visita el enemigo más temido: las lesiones. Si ya estaba lo suficientemente afectado el equipo, el duelo contra el Getafe dejó otra víctima, Atsu. Ayer, en el regreso a los entrenamientos, se conoció que lo que había sido un cambio por prevención al descanso es realmente una importante rotura de fibras que puede dejar al ghanés un mes fuera de los terrenos de juego.

La dolencia, localizada en el recto anterior de su pierna derecha, es un serio revés. Porque más allá del mes de convalecencia, seguramente tendrá que permanecer algo más de baja mientras coge el ritmo. El principal motivo de la lesión de Atsu radica en su tiempo sin jugar; al sumarse a la alta carga de trabajo que suele imponer Javi Gracia en sus entrenamientos, a las primeras de cambio se ha resentido. De nada ha valido que el técnico lo supliera al descanso porque entonces el daño ya había tenido lugar.

Precisamente los medios oficiales de la entidad de Martiricos habían charlado con el jugador cedido por el Chelsea al término del partido del viernes. "La afición es fantástica, jugar en La Rosaleda es espectacular. Me encantó jugar allí y estoy deseando volver a hacerlo. Quiero agradecer a los aficionados su apoyo durante y después del partido. Agradezco esta oportunidad, es lo que necesitaba desde hace tiempo y espero trabajar duro para agradar al cuerpo técnico y al club", citó Atsu, que tuvo una gran primera impresión del nivel de la liga: "Es una de las mejores del mundo, complicada pero me va bien. Es muy técnica, con mucha posesión. Estoy muy feliz de poder jugarla".