El presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, disolvió por decreto el Parlamento nacional y convocó elecciones para el 26 de octubre. "Las elecciones parlamentarias anticipadas son parte de mi plan de paz", aseguró Poroshenko. "La papeleta electoral es el arma más poderosa en manos de los ciudadanos a la hora de defender el país", afirmó el mandatario, quien destacó que de este modo cumple con un compromiso asumido durante la campaña presidencial. Según los sondeos, el 80 por ciento de la población aprueba celebrar elecciones anticipadas. 

"El elemento clave es el diálogo político con el Donbás", señaló Poroshenko en alusión al conflicto entre el Ejército y las fuerzas separatistas prorrusas en el este del país. Después de que la coalición nacional se rompiera hace un mes y los partidos no lograran un acuerdo para establecer un nuevo gobierno, Poroshenko decidió disolver el Parlamento. La decisión se produce un día antes de que Poroshenko coincida con su par ruso, Vladimir Putin, en una cumbre aduanera en la capital bielorrusa, Minsk. La semana pasada, el mandatario ucraniano insistió en que su gobierno precisa tener una postura firme antes de mantener el encuentro con Putin. "Para eso se necesita la unidad del pueblo (...) y un Ejército fuerte", señaló el mandatario en aquella oportunidad. 

Pero la inminente reunión generó críticas en Ucrania. El ex ministro de Defensa Anatoli Grizenko aseguró que el mandatario no debería reunirse en Minsk con el "cínico agresor". Las tensiones entre Rusia y Ucrania se agudizaron aún más en los últimos días, después de que un convoy con presunta ayuda humanitaria enviada desde Rusia cruzara la frontera ucraniana sin el permiso del gobierno local. Este lunes, haciendo caso omiso de las críticas, Moscú incluso anunció que prevé enviar un segundo convoy a territorio ucraniano. Mientras, la presidencia local informó que Poroshenko mantuvo una conversación telefónica con el presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, sobre los planes rusos.