Nicolás Maduro acusó ayer al presidente del Gobierno español en funciones, Mariano Rajoy, de tener una "actitud intervencionista, racista y colonialista" y le pidió que se ocupe de "los problemas de España" y "respete" al país caribeño. "A nivel internacional a veces hay quienes apuestan a lo peor para Venezuela", dijo el líder caribeño en el acto de constitución del Consejo Nacional de Economía Productiva para afrontar los problemas financieros del país.

El presidente del Gobierno español en funciones aseguró el lunes que la situación política y económica venezolana "no es buena" y exigió a sus dirigentes, especialmente al Ejecutivo, convertir a la nación sudamericana "en un país libre y democrático".

"Hubo unas declaraciones totalmente fuera de momento, que demostraron una gran ignorancia sobre lo que sentimos los venezolanos y sobre nuestra realidad del presidente de España", consideró Maduro. El dirigente venezolano instó a Rajoy a ocuparse "de los desahucios, de la gente sin vivienda, del desempleo que ronda a millones de españoles, del empleo precario y de sus problemas allá".

"Que nadie se meta con Venezuela, los problemas de los venezolanos, los vamos a resolver nosotros, son nuestros, de más nadie", recalcó. En su opinión, Rajoy demostró con sus declaraciones una "actitud intervencionista, racista y colonialista", que él como presidente no va "a dejar pasar".

"Presidente Rajoy, usted ocúpese de sus problemas, que aquí nadie se mete en España ni con España. Respetamos, queremos y amamos a España pero que nadie se venga a meter aquí, que nadie meta sus narices en los asuntos que son nuestros", insistió.

Maduro destacó que, pese a los graves problemas de su economía, Venezuela cerró el año con un 6% de desempleo y se preguntó si "puede decir lo mismo Rajoy con su modelo neoliberal, que ha destruido España".

Asimismo, el Parlamento venezolano aprobó por unanimidad incluir en el orden del día un debate sobre las "injerencias" de España en los asuntos internos del país tras las declaraciones de Rajoy. El pleno aprobó con el apoyo de la mayoría opositora el debate sobre esa cuestión.